Continúa la preocupante expansión del socavón de la Ferrocarril poniente, que se sitúa específicamente a la orilla del canal Anzaldúas.
Los habitantes de la zona se encuentran en constante tensión por la acelerada progresión del hundimiento y declaran que casi se originó un accidente automovilístico que pudo resultar en pérdidas humanas.
Ya hace más de un año que surgió la problemática; los vecinos del sector mencionan que no se ha brindado ninguna solución, no se han acercado a poner señalamientos y tampoco han tomado medidas adicionales.
De hecho, los mismos vecinos colocaron llantas, botes, maderas y otras cosas para que la gente extreme precauciones al circular por esta avenida.
Un vecino explicó cómo es que el 27 de marzo por la noche un vehículo que transitaba a alta velocidad por la zona impactó los botes, llantas y maderas que colocaron para señalar el socavón.
Los más afectados por este peligro latente mencionan que ha empeorado mucho con las lluvias y que pueden ver cómo la calle sigue cediendo día con día ante el inevitable crecimiento del socavón.