Ante la celebración del Domingo de Pascua, comerciantes ambulantes ofrecen huevos decorados por diferentes puntos de la ciudad y hacen un llamado a la población en general para que no se pierda la tradición de regalarlos y esconderlos, toda vez que en esta ocasión la venta es realmente muy baja.
“Esto pudiera ser la costumbre de comprarlos para obsequiarlos para que los niños y niñas los escondan en algún lugar y otros los encuentren, como parte de la celebración que está desapareciendo”, dijo Efrén Rodríguez, uno de los vendedores ambulantes.