Con oraciones para victimarios y personas que se dedican o participan en crímenes, concluyeron en Reynosa las “Jornadas por la paz” que efectuó la iglesia católica a nivel nacional tras el asesinato de dos jesuitas en Chihuahua.
José Luis Cerra Luna, párroco de la iglesia Nuestra Señora de Guadalupe, explicó que el objetivo es convertir a los criminales hacia prácticas de bien.
Las “Jornadas por la paz” se efectuó durante todo julio y surgió tras diversos hechos de violencia de los que fueron víctima sacerdotes, entre ellos el asesinato de dos jesuitas en Chihuahua.