La diabetes tipo 2 segunda causa de muerte en México

El acceso a diagnósticos y tratamientos para la diabetes es limitado en el país, lo que agrava la situación.

La diabetes ha sido identificada como una de las principales causas de mortalidad en México, ocupando el segundo lugar en el continente latinoamericano. Este padecimiento no solo afecta la salud general, sino que también es un factor de riesgo significativo para desarrollar complicaciones graves, como la enfermedad renal crónica (ERC), que afecta a un 11% de la población mexicana adulta.

Según la Federación Internacional de Diabetes, México es el séptimo país en el mundo con la mayor cantidad de personas diagnosticadas con diabetes, con una prevalencia del 18.3%. De estas, se estima que un cuarto desarrollará algún grado de ERC. Además, la diabetes está estrechamente relacionada con enfermedades cardiovasculares, que son la principal causa de muerte en estos pacientes.

El acceso a diagnósticos tempranos y tratamientos adecuados es crucial. Sin embargo, se estima que solo uno de cada 100 pacientes con diabetes tipo 2 tiene acceso a una evaluación de la función renal. Esta falta de acceso limita la detección temprana de la ERC, lo que subraya la necesidad urgente de mejorar los diagnósticos y el tratamiento.

En el marco del Día Mundial de la Diabetes, a celebrarse el 14 de noviembre, la Dra. Karen Andrade, gerente médico de Bayer México, comenta: “Es fundamental que las personas con diabetes comprendan la importancia de cuidar sus riñones y su corazón. La detección oportuna de factores de riesgo, como la presencia de albúmina en orina, es clave para prevenir complicaciones graves. Con un acceso más amplio a tratamientos y terapias, podemos mejorar significativamente la calidad de vida de estos pacientes”.

Además, los especialistas destacan la importancia de utilizar tratamientos innovadores que permitan el retraso del daño renal en las personas con diabetes, alejando la aparición de la ERC.

“Bayer cuenta con un tratamiento que no solo ayuda a frenar el deterioro de la función renal hasta por casi 7 años, sino que también reduce el riesgo de eventos cardiovasculares mayores. Este tipo de terapias es crucial para postergar el daño renal, evitando que las personas que viven con esta condición evolucionen a estadios avanzados que requieren alguna terapia de diálisis, mejorando la calidad de vida de quienes padecen diabetes tipo 2,” agregó la Dra. Andrade.