Edificios del mundo se han vestido hoy de naranja para hacer conciencia de la importancia de detener la violencia de género contra las mujeres, a iniciativa de la Organización de las Naciones Unidas.
Estos incluyen oficinas públicas, privadas e incluso estadios de fútbol.
La ONU recordó que mujeres y niñas sufren violencia en casi todos los ámbitos de su vida: en casa, la calle, escuela, transporte público y trabajo.
“No te quedes mirando, pidió, únete a la generación igualdad para eliminar la violencia contra las mujeres y pinta el mundo naranja”.
La propuesta de Naciones Unidas ha recorrido el mundo y cientos de ciudades se han unido, con la esperanza de lograr, entre todos, un mundo mejor para vivir.