La OIT estima que la pandemia empujará a nueve millones de niños al trabajo infantil

Al presentar su informe “Trabajo infantil: estimaciones mundiales 2020, tendencias y el camino a seguir”, el organismo señaló que un modelo de simulación reveló que esta cifra podría aumentar a 46 millones en el caso de que no dispongan de cobertura de protección social esencial

CIUDAD DE MÉXICO .- La pandemia de covid-19 podría empujar a nueve millones de niños al trabajo infantil, alertó la Organización Internacional del Trabajo (OIT).

Al presentar su informe “Trabajo infantil: estimaciones mundiales 2020, tendencias y el camino a seguir”, el organismo señaló que un modelo de simulación reveló que esta cifra podría aumentar a 46 millones en el caso de que no dispongan de cobertura de protección social esencial.

Además, las nuevas crisis económicas y el cierre de las escuelas debido a la emergencia sanitaria podrían provocar que los niños que ya integran las filas del trabajo infantil trabajen más horas o en peores condiciones, mientras que otros más sufran las peores formas de trabajo infantil por la pérdida de empleo e ingresos de sus familias.

El informe, publicado dos días antes de la conmemoración del Día Mundial contra el Trabajo Infantil, advirtió que el número de niños en situación de trabajo infantil se elevó a 160 millones en todo el mundo, tras un aumento de 8.4 millones en los últimos cuatro años.

Esto significa que los avances para erradicar el trabajo infantil se estancaron por primera vez en 20 años, luego de que se invirtiera la tendencia a la baja que logró disminuir los casos en 94 millones de 2000 a 2016.

El número de niños de 5 a 11 años en situación de trabajo infantil aumentó sustancialmente y ahora representan más de la mitad de todos los casos de trabajo infantil a escala mundial. En tanto que el número de niños de 5 a 17 años que realizan trabajos que pueden dañar su salud, seguridad o moral aumentó en 6.5 millones desde 2016 para alcanzar 79 millones.

El director general de la OIT, Guy Ryder, consideró que “las nuevas estimaciones constituyen una llamada de atención” sobre el riesgo en el que se encuentra una nueva generación de niños.

El texto reportó que en África subsahariana el aumento demográfico, las crisis frecuentes, la pobreza extrema y las medidas inadecuadas de protección social han provocado que 16.6 millones de niños más se encuentren en situación de trabajo infantil en los últimos cuatro años.

Mientras que las regiones que han registrado avances desde 2016 en la lucha contra el trabajo infantil, como Asia y el Pacífico, y América Latina y el Caribe, podría sufrir retrocesos por el covid-19.

“Estamos perdiendo terreno en la lucha contra el trabajo infantil, y el último año no ha facilitado nuestra labor”, declaró la directora del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), Henrietta Fore., .

“En este segundo año de confinamientos en todo el mundo, cierre de escuelas, crisis económicas y ajustes presupuestarios a escala nacional, las familias se ven obligadas a tomar decisiones muy drásticas. Instamos a los gobiernos y a los bancos internacionales de desarrollo a que den prioridad a las inversiones en programas que permitan a los niños salir de la fuerza de trabajo y regresar a la escuela, así como en programas de protección social que faciliten esa labor a las familias.”

Trabajo por sectores

De acuerdo con el informe el 70% de los niños en situación de trabajo infantil (112 millones) laboran en el sector agrícola, el 20% en el sector de servicios (31.4 millones) y el 10% en la industria (16.5 millones).

El trabajo infantil en zonas rurales (14%) es casi tres veces más frecuente que en zonas urbanas (5%) y casi el 28% de los niños de 5 a 11 años y el 35% de los niños de 12 a 14 años en situación de trabajo infantil no están escolarizados.

Al respecto, Guy Rider, destacó que se debe aumentar la inversión en el desarrollo rural y promover el trabajo decente en el sector agrícola, ya que “la protección social inclusiva permite a las familias proseguir la escolarización de sus hijos aun en una coyuntura económica adversa”.

La OIT recordó que los niños en situación de trabajo infantil corren el riesgo de padecer daños físicos y mentales y que el trabajo infantil merma la educación de los niños, restringe sus derechos, limita sus oportunidades en el futuro y da lugar a círculos viciosos intergeneracionales de pobreza y trabajo infantil.

En el marco del Año Internacional para la Erradicación del Trabajo Infantil, la asociación internacional Alliance 8.7, a la que pertenecen UNICEF y la OIT, alentó a los Estados miembros, empresas, sindicatos, la sociedad civil y organizaciones regionales e internacionales a redoblar sus esfuerzos en la lucha mundial contra el trabajo infantil para facilitar compromisos de acción específicos.

Los organismos abogaron por fomentar una protección social adecuada que incluya prestaciones universales por hijos; aumentar el gasto en educación gratuita y de calidad, así como facilitar el regreso de todos los niños a la escuela, incluyendo a los que no asistían antes de la pandemia.

También pidieron promover el trabajo decente para que las familias no tengan que recurrir a la ayuda de sus hijos; poner fin a las normativas de género ineficaces y a la discriminación que propician el trabajo infantil; así como invertir en sistemas de protección de la infancia, el desarrollo del sector agrícola, servicios públicos rurales, infraestructuras y medios de subsistencia.