Otra vez, la mañana de ayer domingo fue incendiada una parte del basurero ubicado en el ejido Las Calabazas, que amenazaba extenderse al resto del tiradero, con lo que nuevamente se formaron nubes de humo para desgracia de cientos de familias que viven a corta distancia de ahí y que ya no soportan la contaminación ambiental.
Vecinos de colonias tales como la Aquiles Serdán, Carmen Serdán y otras más situadas por el mismo sector, consideraron conveniente que se ordene la clausura del lugar con lo que habrá de resolverse el problema ambiental y de salud que genera la quema de desperdicios.
Dijeron esperar la intervención de alguna autoridad que ponga remedio definitivo a la situación que afecta sobre todo a niños y adultos mayores, que son los que menos defensas tienen y que llegan a sufrir de males respiratorios a consecuencia de las densas nubes de humo que llegan a formarse.
Ayer mismo se esperaba el arribo de elementos de Protección Civil y Bomberos para que de nueva cuenta se dieran a la tarea de sofocar la lumbre que amenazaba con extenderse al resto del tiradero.
Un residente de la Aquiles Serdán lamentó que cada vez sea más frecuente la quema en ese lugar. Apenas llegan los bomberos a apagar el fuego y a los dos o tres días ya está otra vez el problema.