En verdadera pesadilla está convertida para los transportistas la galopante carestía de combustibles, refacciones y neumáticos, fenómeno que daña seriamente la economía de quienes se dedican a la actividad.
“Las alzas a precios de gasolinas y otros energéticos más, han ido de menos a más aunque y podríamos decir que de cuatro años a la fecha, los incrementos en algunos insumos han sido de hasta un 100 por ciento”, dijo Eduardo Chávez Uresti, apoderado jurídico del GUCH.
La agrupación denominada Grupo Unido de Choferes al igual que las restantes que operan en Reynosa, están sufriendo las consecuencias de una carrera alcista en precios de todo lo que se requiere para darle mantenimiento a las unidades, llámense microbuses o taxis.
‘’El golpeteo por ese concepto a la economía de los transportistas, es frecuente y lamentablemente seguimos en la misma situación, esperando que las autoridades correspondientes finalmente tomen una decisión a la solicitud planteada por cuanto a la actualización las tarifas para el transporte público’’, expresó.
Mientras tanto, a pesar de todas las vicisitudes que enfrentamos, seguimos brindando el servicio a la ciudadanía, apuntó Chávez Uresti.