Rodrigo Prieto: de la fotografía al cine, una historia de éxito

Rodrigo Prieto y su colaboración con Martin Scorsese

Darren Aronofsky y Matthew Libatique; Alfonso Cuarón y Emmanuel Lubezki; Steven Spielberg y Janusz Kaminski; Wong Kar-wai y Christopher Doyle... El cine presume de varias duplas épicas director-cinematógrafo, matrimonios fílmicos que le dan sentido a la experiencia colectiva dentro de una sala oscura. Una de las más atractivas y reconocidas en la última década ha sido la de Martin Scorsese y Rodrigo Prieto.

El mexicano ha trabajado con el legendario cineasta en un corto (The Audition), una serie de televisión para HBO (Vinyl) y cuatro largometrajes (El Lobo de Wall Street, Silencio, El Irlandés, y apenas el año pasado, Los Asesinos de la Luna). Por las últimas tres, Prieto ha estado nominado al Óscar.

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"Siempre se hace una relación muy cercana entre el director de fotografía y el director de una película, y creo que es porque tú te conviertes en sus ojos, y eres el responsable de que, esa cosa que se imagina el director, llegue a la pantalla, pero también con tus propias ideas y propuesta", reconoce el originario de la Ciudad de México en entrevista exclusiva.

"A todo el equipo, el diseñador, los actores, nos toca traducir esa visión del director. Pero la fotografía es donde toda la energía de todos los departamentos se centra en una lente, en una óptica. Por eso es crucial, es clave, y creo que lo directores aprecian cuando alguien entiende esa visión que están proponiendo".

Y, definitivamente, los grandes aprecian lo que Prieto trae a la mesa, pues además de Scorsese, Prieto ha tenido exitosos "matrimonios" con artistas como Oliver Stone (trabajaron juntos en tres ocasiones), Alejandro González Iñárritu (cuatro veces), Ang Lee (dos películas) y hasta Taylor Swift en tres videoclips.

"El permitirme a mí entrar en la cabeza y en los corazones de los directores con los que trabajo, me hace crecer como ser humano, conozco otros mundos, conozco otras ideas. Y el 2023 eso fue clarísimo con el ejemplo de Barbie y Los Asesinos de la Luna.

  • "Por un lado, exploramos el problema del patriarcado a través de una muñeca, y por otro, el problema del colonialismo y la explotación de los nativos en América. Son dos temas radicalmente distintos, pero que me importan mucho. Verlos a través de unos ojos distintos como los de Greta Gerwig o los de Martin Scorsese, es extraordinario, porque sí me hace expandir mi horizonte y mi vida en todos los aspectos".

Es por eso que disfruta la fanfarria y algarabía que se genera en México cada que él o Emmanuel "El Chivo" Lubezki son considerados en el Óscar, como en este 2024, que aspira de nueva cuenta a una estatuilla dorada por su trabajo en Los Asesinos de la Luna, luego de tres nominaciones en el pasado.

"Agradezco que los Óscares sí reconozcan a la fotografía, porque hay otros festivales y ceremonias, como los mismos Globos de Oro, que no dan premio a la fotografía. Ni Cannes, ni Venecia, ni Berlín lo hace. Hay un festival específico en Polonia, el Camerimage, al que he ido varias veces, pero nada más", comparte Prieto.

"La cinematografía es esencial y exclusiva del cine, es lo primero que ve el espectador, la imagen. Por eso sí es bueno para quienes nos dedicamos a esto que la gente entienda lo que hacemos y que también vayan a ver las películas por nuestro trabajo, no solamente por el director o el elenco".


¿QUÉ HAY DETRÁS DE SU MIRADA?

Luego de haber sido los ojos de cineastas como Pedro Almodóvar, Spike Lee y Julie Taymor, entre otros, Rodrigo Prieto está listo para mostrarle a la gente lo que esconde detrás de los suyos en su debut como director con la película Pedro Páramo, adaptación de la mítica novela de Juan Rulfo.

"Es algo que muchos hemos leído desde la preparatoria, y algo que a mi me gustó muchísimo desde ese entonces. La principal preocupación era justo esa: ¿cómo llevo esta novela, que me encanta cómo es, a la pantalla, pero también con mi perspectiva y las cosas de ella que más me gustan?", se cuestionó el mexicano.

"¿Cómo utilizo ese mundo de Rulfo y de sus propias vivencias, traumas, recuerdos, y ahora yo comunico lo mío a través de su mundo? Ese proceso fue muy interesante para mí".

A unas semanas de los premios Óscar, el cinefotógrafo se encuentra inmerso en la postproducción de Pedro Páramo, producida por Netflix y con Manuel García-Rulfo como protagonista.

Su energía no está enfocada en si gana o no dicho galardón, sino en disfrutar sus nuevos juguetes: el diseño sonoro, la supervisión de los efectos especiales y la recta final de la edición de su primer filme.

"Me interesa que la vean familia, amigos, colegas, gente de cine, pero también gente que no ha leído la novela, que no habla español. Me interesa que la película llegue a un público grande. No es una historia fácil, pero por alguna razón sigue presente, mucha gente es muy apasionada de la novela, y hay algo importante ahí".

Lo anterior no quiere decir que Prieto pasa sus días quieto en su sala de edición. El 19, 20 y 21 de enero pasados iluminó la ópera "Das Rheingold", de Wagner, que fue dirigida por Gustavo Dudamel en Los Ángeles.

"Fue en el Disney Concert Hall de Los Ángeles. El set lo diseñó el mismísimo Frank Gehry (el legendario arquitecto ganador del Premio Pritzker), que tiene 95 años. Fue una experiencia muy, muy interesante para mí".