La cantante británica Jessie J volverá a ser hospitalizada, apenas siete semanas después de haberse sometido con éxito a una cirugía por cáncer de mama y, además, necesita pasar nuevamente por el quirófano antes de que termine el año.
Esta semana, la intérprete de "Bang Bang" fue ingresada tras presentar síntomas que hacían sospechar de un coágulo de sangre en los pulmones. Afortunadamente, los estudios descartaron esa posibilidad, aunque los médicos detectaron la presencia de líquido en dicho órgano y una infección sin identificar. Pese a ello, Jessie decidió darse de alta ese mismo día y continuar la recuperación en casa, confesando que "odia estar en el hospital".
Este viernes, la artista de 37 años, cuyo nombre real es Jessica Cornish, confirmó en Instagram que deberá someterse a otra operación. "Estoy fluyendo con la vida. Aprendiendo quién soy en esta etapa como madre y enfrentando los momentos en los que mi salud se complica de forma inesperada", escribió.
En el mismo mensaje, aseguró que está decidida a encontrar un equilibrio entre la crianza de su hijo, su recuperación física y el lanzamiento de nueva música. "Sigo en plena recuperación y mi cuerpo aún está encontrando su equilibrio. Pero AMO la música, AMO mi vida y quiero vivir el momento", expresó, antes de reflexionar que, ante los cambios imprevistos de la vida, solo queda adaptarse en lugar de entrar en pánico o molestarse.
Jessie J anunció su diagnóstico de cáncer de mama en junio, a través de un emotivo video en el que admitía que necesitaba un abrazo. Desde entonces, ha compartido que ha atravesado ataques de pánico, lágrimas, miedo y días especialmente duros, siendo la cirugía el momento más difícil físicamente.
La cantante es madre de Sky, un niño de 2 años fruto de su relación con el basquetbolista Chanan Colman. La pareja fue vista por primera vez en abril de 2022, cuando fueron captados besándose en Los Ángeles. En 2021 habían enfrentado la pérdida de un embarazo y, en mayo de 2023, celebraron la llegada de su "bebé arcoíris".