- Monterrey, N.L.
Libre de Reír es una serie documental donde la comediante Sofía Niño de Rivera lleva sus conocimientos de stand up a una cárcel.
En el show enseña y entrena en tres grupos diferentes a los presos para expresar a través de la comedia su dolor y sus problemas.
De esta forma tiene entre sus alumnos a hombres, mujeres y personas LGBTTTIQ+.
Lo que ellos no saben, es que los que se desempeñen mejor serán llevados a presentar su set en un teatro junto a la maestra.
La serie, dirigida por la chilena Maite Alberdi (El Agente Topo), mezcla las clases con entrevistas con los presos y sus familias, logrando algunos momentos verdaderamente conmovedores.
La tesis es simple, el llevarlos a expresar el dolor con risas y enfrentarlos a los aplausos es una extraordinaria terapia para su encierro.
Sofía utiliza su humor, pero sabe que debe darle el espacio para brillar a sus alumnos, lo que la convierte en la persona ideal para el experimento.
Es una serie que sorprende y que te deja con ganas de saber más de los peculiares alumnos, quizás una temporada más larga le hubiera ayudado.
Libre de Reír sorprende y entre las risas tiene mucho corazón.
THE AFTERPARTYAl terminar la primera temporada de la divertida y original The Afterparty, era difícil imaginar como cuadraría con los personajes una segunda parte, considerando que se tendrían que involucrar en otro crimen post fiesta.
Pero los creadores de la serie dieron en el blanco, y la continuación sigue siendo tan original y divertida como la primera parte, trasladando la acción al día siguiente de una boda, donde el novio amanece muerto.
Aniq y Zöe, interpretados por Sam Richardson y Zoe Chao respectivamente, se ven nuevamente en el medio de todo, y nuestro protagonista decide llamar a la detective de la vez anterior, que ahora ya se retiró de la policía.
De esta forma el personaje de Tiffany Haddish llega a ayudar haciendo una ronda de interrogatorios a cada sospechoso, que nuevamente es contada con un estilo diferente.
Así arrancamos con una comedia romántica, para pasar a un drama de época romántico al estilo Bridgerton, a uno estilo cine negro en blanco negro, a uno que asemeja un gran robo y a uno maravilloso contado al estilo del cine independiente de Wes Anderson.