Escasez de municiones

Los tenedores de armas se avisan a través de TikTok de los lugares que recientemente reabastecieron sus suministros con la etiqueta de #ammoshortage; no habrá abasto durante un año

McAllen, TX.

Los propietarios de armas en EU enfrentan una pesadilla: escasez de municiones.

De acuerdo con el sitio de noticias Vice News, los tenedores de armas se avisan a través de TikTok de los lugares que recientemente reabastecieron sus suministros.

Con la etiqueta #ammoshortage (escasez de municiones), dice Vice, estos usuarios comparten fotos de anaqueles vacíos, o presumen sus amplias reservas de balas y cartuchos. Otros “ofrecen soluciones creativas a la escasez como atropellar gatos monteses o estrangular pavos salvajes en lugar de dispararles”.

De acuerdo con el portal, una “tormenta perfecta de factores” contribuyó a esta escasez.

El año pasado, las compras de armas marcaron récord. Entre marzo y septiembre de 2020, las ventas se dispararon 91 por ciento respecto al mismo período de 2019. Sin embargo, ante las restricciones por la pandemia de Covid-19, los envíos internacionales de materiales usados en las municiones se retrasaron. En estados donde no eran considerados negocios esenciales, agrega Vice, los productores tanto de armas como de balas y cartuchos pararon operaciones.

Y la situación podría no resolverse pronto. John Taylor, dueño de una tienda en Las Vegas, dijo que ya fueron avisados de que los productores no regularizarán las entregas por al menos un año.

En Estados Unidos el 3% de la población controla la mitad de todas las armas que existen.

Se trata de 7,7 millones de personas que tienen entre 8 y 140 armas cada una, pero las cifras podrían aumentar según revela una encuesta sobre armas de fuego elaborada por las universidades de Harvard y Boston

El estudio establece que los estadounidenses tienen alrededor de 265 millones de armas, lo que representa que se posee más de un arma por cada ciudadano en promedio.

Y eso no es todo: 133 millones de esas armas, es decir la mitad, están en manos de solo el 3% de la población de Estados Unidos.

EPIDEMIA DE VIOLENCIA 

El presidente Joe Biden firmó una orden ejecutiva para intentar controlar -y restringir-la venta de materiales y herramientas que permitan ensamblar este tipo de armamento en casa, además de otras medidas para intentar frenar la “epidemia de violencia por armas”.

“La violencia con armas de fuego en este país es una epidemia y es una vergüenza internacional”, dijo Biden desde los jardines de la Casa Blanca.

El mandatario cuestionó la facilidad con la que se pueden ensamblar estas armas y el peligro que suponen.

“Estas son armas caseras (...) En consecuencia, cualquier persona, desde un criminal hasta un terrorista, puede comprar este kit y en tan solo 30 minutos, ensamblar un arma “, dijo.

La venta legal de armas está protegida por la Segunda Enmienda de la Constitución de Estados Unidos y cualquier intento de control es visto con recelo por los defensores de esta enmienda, principalmente republicanos de zonas no urbanas.

Varios congresistas republicanos y organizaciones proarmas criticaron la orden ejecutiva, que busca también prohibir otros dispositivos que puedan ser usados en tiroteos e invertir fondos en prevención.

La Asociación Nacional del Rifle, el grupo de presión sobre las armas más grande de Estados Unidos, describió las medidas como “extremas” y dijo que estaba lista para combatirla en las cortes.

LAS ARMAS ‘FANTASMA’

Es sabido que comprar un arma legalmente no es una tarea complicada.

Tener la edad requerida y pasar un examen de antecedentes penales es suficiente en algunos estados. En otros, no son necesarios ni los antecedentes.

Sin embargo, hay una forma incluso más sencilla de tener un arma sin necesidad de ningún control o trámite burocrático: ensamblar tu propia pistola en casa.

Es tan sencillo -y legal- como ordenar en internet un kit con las diferentes partes y herramientas.

El resultado es casi el mismo: un arma de fuego.

Pero sin número de serie. Sin registro. Sin controles. Sin que ninguna autoridad sepa que la tienes. Accesible a menores y personas con trastornos mentales.

Las llaman “armas fantasma” (ghost guns, en inglés) porque al ser ensambladas en casa, no existe forma en que se les pueda rastrear.