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REMINISCENCE

En un mundo futuro, donde la geografía ha cambiado, Miami se ha convertido en una ciudad parcialmente sumergida en el mar y la gente paga por acceder a una máquina que le permite revivir sensorialmente sus recuerdos y hurgar en ellos.

El negocio lo manejan Nick (Hugh Jackman) y Emily (Thandiwe Newton), él investigador de la mente, ella ex policía, pero todo cambia con la llegada de una cliente en particular, la misteriosa y bella Mae (Rebecca Ferguson).

Reminiscencia es una mezcla de thriller de cine negro con cinta de ciencia ficción que si bien resulta muy entretenida y tiene una muy buena producción y un reparto atractivo, en el balance final deja un ligero sabor a algo ya conocido y quizá mejor ejecutado.

El guion escrito por la directora Lisa Joy es muy eficiente, echa mano de recursos de efectividad probada y por lo tanto eso lo hace un poco predecible, mas cumple con el objetivo de dejar al espectador al final discutiendo las decisiones de los personajes.

La química que se dio entre Jackman y Ferguson en El Gran Showman se pone nuevamente de manifiesto y eso es uno de los atractivos de la película.

Marina de Tavira tiene un papel pequeño, pero de suma importancia en la trama y lo hace bien, aunque deja la sensación de que puede hacer mejores cosas si le dan los proyectos adecuados.

Irónicamente, Reminiscencia puede resultar un poco olvidable, pero te entretiene bien por casi dos horas mientras la estás viendo.


DEUDA DE SANGRE

Clint Eastwood interpreta a Terry McCaleb, un agente del FBI encargado de seguir la pista de asesinos en serie. Un infarto, en plena persecución, lo obliga a retirarse, y dos años después de su último caso sin resolver recibe un trasplante de corazón. El actor también dirige este thriller policiaco con suficientes giros para mantenerlo interesante durante dos horas, pese a un final predecible. Terry vive de las glorias del pasado, pero un incidente lo obliga a demostrar una vez más que debe regresar a su profesión para demostrar que es el mejor. 

En este caso es la aparición de Graciella (Wanda De Jesus), una mujer latina que le pide resolver el asesinato de su hermana, que es la donadora del corazón de McCaleb. 

La historia está bien contada, no deja cabos sueltos, aunque sí tiende en momentos a verse medio cursi, sobre todo con el romance que vive el personaje de Eastwood, que la verdad no viene al caso. 

A final de cuentas la cinta cumple su misión de entretener y dejará satisfechos a los fans de Eastwood.