Ahora disfrutar la fruta, tacos o un rico caldo de res con limón, está lejos de la realidad, ya que el precio del kilogramo está a la alza.
En centros comerciales el precio se encuentra hasta en 80 pesos y en tienditas en las colonias o fruterías un poco más alto, dependiendo del negocio.
“Yo solamente llevo la mitad porque está muy caro, solo para la comida, porque pues mejor compro huevo”, dijo Ana Serrano, cliente de un centro comercial.
Otras familias llevan algunos limones, tres o cuatro para aderezar las salsas, ya que comprar el kilo completo es imposible.
El año pasado el kilogramo de limón se podía vender hasta den 25 o un poco más, por lo que el alza si es considerable.
Desde que inició el año, el precio se ha ido a la alza, generando afectaciones en el bolsillo de las familias.
Es uno de los productos que se han ido a la alza, que forman parte de la canasta básica para los Mexicanos y que se usa mucho en las mesas de los hogares, para antojitos, comida, postres y salsas.
TAMBIÉN EN TEXAS
Al igual que en México, se “disparó” el precio del kilogramo de limón que esta semana abrió con un precio de 80 pesos, también al otro lado de la frontera persiste la misma escasez y encarecimiento, comercializándose en 6 dólares (alrededor de 121 pesos al tipo de cambio actual) por kilogramo del cítrico.
Más grave la situación, las limas que son utilizadas como producto alterno se vende cada uno en 50 centavos de dólar (10 pesos con 15 centavos).
Los consumidores de la frontera se quedaron sin opciones frente a la crisis del limón, pues en Estados Unidos de América es mucho más caro que en el lado mexicano.
La pérdida de cosechas y producto, así como factores climáticos, producción y costes, han provocado en la última semana una carestía en los precios del limón, cuyo precio se ha incrementado ahora hasta en un 150%.
La primera semana de enero de 2022 inició con un precio de 34 pesos el kilogramo, gradualmente fue subiendo de precio y al inicio de la presente se colocó en 80 pesos por kilogramo.
Los consumidores en la frontera sin opciones ante la crisis del limón.