El Grupo Anecdotario Reynosense con su programa de lectura “Vamos a leer” rinde homenaje al dramaturgo Tomás Urtusástegui
Disfrutan velada literaria
El Grupo Anecdotario Reynosense con su programa de lectura “Vamos a leer” rinde homenaje al dramaturgo Tomás Urtusástegui
El viernes 16 de febrero, en punto de las 18:00 horas, en La Hacienda San Felipe, recinto oficial del Grupo Anecdotario Reynosense, vamos a platicar, se dieron cita miembros del grupo, invitados y participantes a la segunda velada literaria, del programa de lectura, “Vamos a leer”, el cual nació por la iniciativa del señor Joaquín Cantú André y su esposa Deyanira Garza de Cantú, cabe hacer mención que el programa inicialmente fue pensado para niños, pero apoyándose en la escritora y promotora de lectura y escritora Mercedes Varela, decidieron involucrar primero a jóvenes y adultos.El programa lo abrió la maestra Varela, dando la bienvenida a los asistentes y agradeciendo la invitación del señor Cantú André, para enseguida hablar del homenajeado y después comentar lo satisfecha que estaba por haber podido reunir a quienes conformaban el grupo de “Ventanas a la lectura”, procediendo a presentar a César Varela y José René Cruz quienes leyeron “Examen médico”; que trata sobre el conflicto de Juvencio, quien no está muy convencido de hacerse el examen prostático. TEXTOS DIVERTIDOSEnseguida Mercedes Varela y César Varela , sacaron risas entre el auditorio al dramatizar “Estar con ella”, obra en la que se aborda el problema matrimonial cuando ya se ha perdido el amor y solo queda la rutina. Zahida Salazar y Ma. Alma Gómez García, se convirtieron en madre e hija y cocinaron a un misionero blanco en “Aprendiendo a cocinar”. Alejandra Chávez leyó “Fumarola”, y enterneció con la historia del padre preocupado que se equivocó y tuvo que desandar sus pasos. Cristante Morán, de 10 años asombró a todos con la pregunta ¿Qué es el amor?. El sr. Mario Chávez, leyó acerca de un tema muy actual y controvertido “Acoso sexual”. La maestra Tere Hinojosa, contó la historia de una peculiar mujer a quien desde niña le pusieron el sobrenombre de “Pecado”. Fue la maestra Varela, la encargada de cerrar esta velada, y a petición, leyó un texto de su autoría titulado “El amor que no juraste”.