Ciudad de México
El Pantera perdió en 2004 su máscara ante Misterioso Jr., pero el público le hizo que se la volviera a poner.
Después de la caída de su incógnita y salir del CMLL, pues ya no lo programaron en la Arena México, el luchador de nombre Javier Pozas se fue a Japón, donde tuvo una historia curiosa junto con otros dos compañeros mexicanos, quienes personificaban a luchadores nipones.
Eso le dio la alegría para seguir en el pancracio y a su regreso a México anduvo por cualquier cantidad de plazas en el sector independiente, y pasados tres años volvió a portar su máscara porque la afición a los costalazos así se lo pidió.
“Sin mi máscara no me desenvuelvo a gusto en un ring, batallé mucho para que mi licencia de luchador fuera de uno encapuchado y es la que le da vida a Javier, es lo más valioso que tengo”, compartió el gladiador, quien la única prohibición que tiene es volver a apostar su tapa.
El Internacional Pantera está en Welcome To Mi Barrio y el próximo 17 de septiembre buscará coronarse campeón Calavera en la Arena Tepito, en una batalla sin cuartel contra Versal.
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