Jorge “Maromero” Páez fue criticado por subir al ring vestido de manera estrafalaria, con peinados punk, por pelear burlándose de sus rivales y dando maromas, las cuales aprendió en su etapa de cirquero. Su personalidad chocó con Julio César Chávez, y al hacerse testigo de Jehová rechazó entrar al Salón de la Fama del Box.
Nervioso con LocomíaEl 29 de mayo de 1991, Jorge Páez fue presentado por el conductor Raúl Velasco para ponerle al grupo español Locomía la medalla del Festival Acapulco.
El “Maromero” apareció vestido a su estilo, de manera extravagante y provocó las carcajadas del público y más cuando le gritaron ‘¡Beso, beso!’.
“Para mí es un orgullo darles esta medalla Acapulco 91 a Locomonía. ¡Ay perdón! Locomía. Estoy un poquito nervioso porque es la primera vez que estoy aquí. Lo que pasa que me gustaron porque son diferentes a todos los grupos”.
Persona non grata
Actualmente el ex campeón del mundo vive en Las Vegas y como parte de su religión, invita a otras personas para que sean Testigos de Jehová, lo que le ha costado ser insultado.
“Todos quisieran verme en la ruina, pero no estoy así, estoy un poco enfermo de que me metí en el boxeo, pero no le hace, eso no me quita la alegría que traigo. Ahora soy Testigo de Jehová, ahora tengo a Jehová en el corazón. La gente me critica, me han corrido de casas, hasta me han echado agua, no le hace, no me rechazan a mí, rechazan a Jehová”, dijo.