¡Aún no acabas!

Aunque hayas terminado el recorrido en la mejor condición física, debes atender varios aspectos para que tu organismo no te reclame los días siguientes

Cagliari, Italia

Cruzar la meta de una carrera, como la del Día del Padre en la Ciudad de México que es de 21 kilómetros y se corre mañana (hoy), no es lo último que hay que hacer en una competencia: te falta una parte muy importante de todo el proceso: la recuperación.

Aunque hayas terminado el recorrido en la mejor condición física, debes atender varios aspectos para que tu organismo no te reclame los días siguientes y, sobre todo, puedas estar listo pronto para volver a correr.

Y más si se trata de un trazado como el del medio maratón con el que la Asociación de Corredores del Bosque de Tlalpan celebran a los papás, que tiene pendientes que exigen esfuerzo.

Sigue trotando

Tras pisar el último tapete -que marca tu tiempo oficial-, no debes detenerte ni desplomarte en el piso, por muy cansado que te sientas.

Entrenadores y médicos del deporte señalan que debes bajar el ritmo poco a poco, trotar unos minutos y luego caminar antes de una sesión de unos 15 minutos de estiramientos de todo el cuerpo.

Una vez completado este proceso, entonces puedes acudir al área de recuperación, pues ahí recibirás apoyo para relajar los músculos y eliminar los residuos metabólicos que produjo el esfuerzo físico.

Como el cuerpo necesita recobrar sus reservas de glucógeno, es importante comer al acabar el recorrido. Los carbohidratos complejos como avena, arroz o pasta, así como proteínas (pescado, queso y yogur) son lo más recomendable.

Sin embargo, la etapa de recuperación no termina ahí. Procura dormir al menos 8 horas y al otro día del 21K realizar ejercicios y movimientos para darle mantenimiento a piernas y pies.