Los Leones Negros rompieron una larga sequía de 11 años sin obtener un solo campeonato y festejaron ¿a lo grande?
En mayo de 2014 los melenudos celebraron una de las últimas alegrías del futbol mexicano: la Final del Ascenso. Vencieron a los entonces Estudiantes Tecos 4-3 en tanda de penales (1-1 marcador en tiempo reglamentario) y ganaron su derecho a jugar en la Primera División.
- Once años después, en el mismo mes de mayo, la UdeG se alzó con el trofeo del Clausura 2025 de la Liga de Expansión MX ante la misma cantidad de afición -sold out en el Estadio Jalisco- que la vio ascender a la ahora llamada Liga MX.
¿La diferencia? El premio.
A unos días de presenciar la Final del Campeón de Campeones, misma que al ganador acreditaba como nuevo equipo de la máxima división del balompié mexicano, el sabor es diferente.
La pasión que se vivía entre los rivales de la liga de plata ha ido disminuyendo, pues decisiones de la gente de pantalón largo le ha quitado el sazón y mayor felicidad a esta clase de encuentros que atraían miles de vistas, ya que la incertidumbre de conocer al nuevo cuadro del circuito generaba más que un solo sentimiento.
"Ojalá que algún día nos den una oportunidad de competir deportivamente para regresar a la máxima categoría, porque hay equipo, institución, afición, vale la pena intentarlo", resaltó Alfonso Sosa, entrenador de la UdeG, tras la obtención del título.
En la actualidad, para que exista la posibilidad que un equipo de Liga de Expansión consiga llegar a Liga MX debe pasar primero la certificación a inicio de temporada.
No termina ahí, pues para que se abra la oportunidad, debe de existir un mínimo de cuatro equipos certificados; para este año futbolístico solamente hubo dos cuadros con dicho papeleo en regla: Leones Negros y Atlante.
A pesar de contar con ello y celebrar el campeonato, no tendrán la oportunidad de subir de división si llegaran a ganar el Campeón de Campeones ante el Tapatío, equipo que por ser filial de Chivas no cuenta con opción a ascenso.
"Siempre competimos para ganar, independientemente de si hay ascenso o no. Más allá de eso, el escenario fue ideal, aunque lo sería más si hubiera ascenso", agregó el técnico.
Polos opuestos se viven en 11 años de diferencia y no se sabe con exactitud hasta cuando cambiarán las cosas.
Por lo pronto, UDEG y Tapatío se verán las caras el sábado 31 de mayo y el sábado 7 de junio, en la ida y vuelta, respectivamente, del Campeón de Campeones; el ganador deberá conformarse con el simbólico trofeo que solo deslumbrará entre las vitrinas.