Dublín, Irlanda.
El controvertido luchador irlandés Conor McGregor se ha librado esta semana de pasar por un tribunal estadounidense, pero la polémica no le abandona y podría volverse a ver ante un juez por una supuesta agresión cometida en un pub de Dublín.
Según informó hoy el diario "Irish Independent", la Policía irlandesa (Garda) le interrogó el martes en una comisaria de la capital para investigar una denuncia presentada por un hombre que aseguró que McGregor le dio un puñetazo.
La presunta víctima declaró que la estrella de la artes marciales mixtas le agredió después de mantener un breve altercado en un pub del barrio de Drimnagh, al sur de Dublín.
McGregor, de 30 años, se presentó voluntariamente en la citada comisaria para dar su versión de los hechos y fue puesto en libertad sin cargos, si bien la Garda remitirá un informe a la Fiscalía para que valore si presenta cargos contra él, de acuerdo con el "Independent".
Apenas un día antes, los abogados del luchador llegaron a un acuerdo extrajudicial con un hombre al que en marzo pasado le arrebató el teléfono celular con el que trató de fotografiarle en Miami Beach, por lo que quedó libre de cargos en Florida.