Integrantes de la dirigencia nacional del PAN y el presidente de la Comisión Mexicana de Derechos Humanos, René Bolio acudieron a la sede de la embajada de Cuba en nuestro país a denunciar asesinatos, secuestros y tortura de cubanos de parte del régimen castrista; y en respuesta desde dentro les pusieron música para boicotear su protesta.
Este martes, el secretario nacional de Acción Juvenil y presidente de la JODCA, Alan Ávila; y la secretaria de Asuntos Internacionales del PAN, Mariana Gómez del Campo; así como René Bolio acudieron a la calle de Presidente Masaryk 554, en Polanco, sede cubana en México para hacer una protesta.
Sin embargo, desde dentro de la embajada pusieron música a altos niveles para interferir con sus discursos.
Primero, René Bolio pudo emitir un breve mensaje donde dijo que desde hace 62 años los derechos humanos en la Isla son violentados, por eso hoy la gente está saliendo a protestar, pero el régimen está amenazando y violentando a los cubanos.
Por su parte, Alán Ávila, presidente de las Juventudes de la JODCA, comenzó su discurso pero a media intervención comenzó a sonar la música desde dentro de la sede diplomática.
“En la actualidad, el dictador Miguel Díaz hace un falso llamado a una revolución pidiendo a los seguidores que salgan a las calles a defender el mismo régimen. Este es una convocatoria irresponsable, deleznable, cobarde, pues únicamente está confrontando al pueblo con el mismo pueblo e incluso esto puede llegar a amenazar con una guerra civil”.
ALTO A VIOLENCIA
“Le exigimos a Miguel Díaz n alto a la violencia, que respete el Estado de Derecho y que convoque a elecciones libres y democráticas, reguladas por un órgano independiente. El pueblo cubano sometido por años ante la incompetencia, la indolencia del partido comunista cubano, hoy den luz de esperanza ante las movilizaciones sociales el grito de libertad, nos piden a la comunidad internacional que no seamos indolentes y que acompañemos en esta crisis humanitaria en la que se están encontrando”, dijo Alán Ávila.
Acallan
Alán Ávila, presidente de las Juventudes de la JODCA, comenzó su discurso pero a media intervención comenzó a sonar la música desde dentro de la sede diplomática