Beneficiaría extender negociación de TLC

Extender los plazos de la negociación para modernizar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLC), en caso que ésta no concluya el próximo marzo, podría traer ventajas para México, consideraron especialistas.

Francisco de Rosenzweig, socio de la firma de abogado White and Case y muy cercano a la negociación, explicó que cada vez más en Estados Unidos hay voces que piden la permanencia del acuerdo.Entre más pase el tiempo mayores son las resistencias que está enfrentando la Administración estadounidense para poderse retirar del acuerdo, hay una serie de gobernadores, legisladores y el sector privado norteamericano que han manifestado su apoyo al TLC.Conforme avance el proceso, las resistencias internas que expresan la importancia de mantener el TLC me parece que se incrementan y eso, en un país de pesos y contrapesos, pareciera que los márgenes para una salida se reducen, explicó.Sin embargo, se mostró favorable a que para la siguiente ronda, en Montreal, se alcanzaran acuerdos y en consecuencia el tratado terminara en los tiempos planteados.Esteban Polidura, director de Inversiones para UBS en México, dijo que sin descartar ciertos efectos negativos, como la incertidumbre y la consecuencia que esto tiene en procesos de inversiones o toma de decisiones en empresas, alargar el proceso podría ser positivo.Tiene muchos efectos importantes, algunos de ellos positivos, como que al extenderse el plazo de negociación estamos hablando que el proceso no termina y eso nos pondría en un escenario similar al de 2017, donde el TLC no se canceló sino que siguió operando como siempre y el País no resintió un efecto negativo en producción manufacturera.Al extender el plazo de negociación, aun cuando la Administración Trump menciona constantemente la posible cancelación del TLC, al posponer estos acuerdos para otros meses habla que el Gobierno sí tiene cierto interés en que se renegocie, añadió.José Luis de la Cruz, director del Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico (IDIC), dijo que si el proceso no se acaba en marzo, antes de las elecciones de julio, aquellos que compitan por los diferentes puestos políticos tendrán que involucrarse.El Presidente Trump está jugando a presionar al País por varios lados. Cita al proceso electoral y, de manera velada, está planteando que podría flexibilizar su negociación por el proceso electoral pero entonces ya está jugando con los tiempos políticos de México. Es un mensaje a las autoridades mexicanas que conoce de los tiempos políticos, de las necesidades que ello implica y entonces las usa como mecanismo de negociación.Que la negociación se resuelva en marzo evitaría que los candidatos o quienes aspiran al poder en México hagan un planteamiento claro de qué posición tienen sobre el acuerdo o qué tendrían que hacer si este se cancela, explicó.Polidura agregó que luego de las elecciones, que cualquiera que sea el candidato que gane seguramente revisará los acuerdos a los cuales llegó la actual Administración e incluso podrían pedir que se revisen algunos puntos que ya se hayan cerrado.Si se extienden los tiempos, el nuevo Presidente sí tendría ya muchas más facultades para cambiar lo que se ha negociado, mover al equipo o incluir personas adicionales. La fecha límite para que el equipo pueda seguir como hasta ahora es noviembre 30, añadió.Dijo que en UBS han hecho un análisis exhaustivo sobre la postura que los precandidatos a la Presidencia sobre el TLC y que en general hay muy poca o nula información sobre los programas económicos y, excepto por ciertos comentarios en foros, no hay una postura sobre lo que haría cualquiera de ellos sobre este tema.