Díaz Ordaz, Tam.- Después de haber estado 3 meses padeciendo ventas bajas que a muchos sólo les permitía sostenerse económicamente, el comercio ambulante nuevamente se reactivó con el regreso a clases.
Celestino Peña Quiroga, un comerciante dedicado a la venta de nieves de agua, elotes y frituras, dijo que el tiempo de vacaciones fue un verdadero martirio para ese sector comercial, pues aunque el calor ha sido sofocante, las personas simplemente no compraban productos refrescantes, posiblemente por la precaria economía.
Como es sabido, cuando las escuelas comienzan a operar, los alumnos se convierten en la tablita de salvación para muchos vendedores ambulantes, pues son sus principales consumidores.
“En vacaciones con la venta nos ganábamos como 60 pesos diarios sin exagerar, vivíamos literalmente al día, ahora con los estudiantes ganamos un poco más, unos 240 pesos diarios”, expresó Peña Quiroga.
Las altas temperaturas que siguen prevaleciendo en la región, son un aliado para los comerciantes que venden nieves, aguas frescas, paletas o fruta.
Sin embargo, conforme avancen los meses y el clima comience a cambiar, la venta de paletas o alimentos fríos, ya no tendrán la misma demanda, es decir que la venta de esos productos se desplomará, obligando a comerciantes del ramo a cambiar de insumos para ofertar.
En “tiempo de frío”, la gente pide alimentos calientes, y la mejor opción para los vendedores ambulantes, es la comercialización de elotes, aseguró el entrevistado.
Tanto en Díaz Ordaz, como en el resto de las ciudades de la región ribereña, el exterior de las escuelas, son los mejores punto de venta para los comerciantes ambulantes, que ofrecen diversas golosinas y fritangas, que aunque no son muy recomendadas por los médicos, si son muy solicitadas por niños y jóvenes, principalmente a la hora de salida de sus clases.