Alertan de creciente presión a finanzas

Las finanzas del País enfrentan problemas estructurales que, de no atenderse, colocarán a la economía al borde del precipicio.

Un informe del Centro de Estudio Espinosa Yglesias (CEEY), entregado al Senado, alerta sobre la existencia de seis factores que generan una creciente presión sobre el presupuesto.La carga de las pensiones, un gasto ineficiente y excesivo, déficit crónico, federalismo fiscal obsoleto y una economía informal que no aporta al erario.Para Enrique Cárdenas, director del Centro, es necesario que el Congreso apruebe mecanismos para vigilar el ejercicio del gasto, utilizar las atribuciones adicionales de la Auditoría Superior de la Federación y crear un grupo de expertos que proponga un nuevo Sistema Nacional de Pensiones.Durante una reunión con la Comisión Especial de Análisis y Seguimiento de las Finanzas Públicas de la Cámara alta, el especialista explicó que el gasto en pensiones, públicas y privadas representa una de las principales presiones al presupuesto.Da lugar a mucha discrecionalidad. Cuando hay un presupuesto para algo y se usa para otra cosa se empieza a perder el control presupuestal, no por parte de hacienda, sino por parte de los mexicanos y eso da lugar a la corrupción, dijo.Aseguró que México padece un déficit crónico, ya que la deuda ha aumentado 12 puntos del PIB en los últimos cuatro años.Es preocupante si se mantiene esa tendencia en el aumento del costo del servicio de la deuda que tiene un 19 por ciento de crecimiento real con relación al año pasado, detalló, tras explicar que el país ha tenido que pedir prestado sólo para poder pagar los intereses.Es como con las tarjetas de crédito, te ahogan. No estamos ahí, pero vamos para allá y vamos rápido. Se tiene que detener.Reunido con senadores, Cárdenas sostuvo que existe un federalismo obsoleto que es necesario revisar y replantear, pese a su complejidad.Se refirió de manera particular al problema de la economía informal, ya que se perfila como la única salida para poder incrementar los ingresos tributarios, a través de la ampliación de la base gravable.El esfuerzo que ha habido en materia de finanzas públicas ya no tiene mucho margen de maniobra. Fuera del IVA que podría dar otros dos puntos porcentuales del PIB, el ISR está empezando a llegar a su tope y la única manera de entrarle es abatir la informalidad, señaló.Existe la idea de que son muy bajos ingresos, pero no es la realidad, por lo tanto el potencial de grabarlo es muy alto.