Alejandro, el hijo de Romero Deschamps con perfil bajo y una opaca offshore en Islas Vírgenes

Alejandro Romero Durán, de 51 años, ha tenido el perfil más bajo entre los tres hijos de Carlos Romero Deschamps, pero no por ello ha vivido en la austeridad y con transparencia: en una muy opaca sociedad de papel de las Islas Vírgenes Británicas puso 10 inmuebles que tiene en México

De los tres hijos de Carlos Romero Deschamps, el otrora líder del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana, Alejandro Romero Durán ha tenido el perfil más bajo: a diferencia de sus hermanos, el hombre de 51 años no ha presumido en redes sociales sus viajes en jets privados, departamentos en Miami, ostentosos Ferrari o vacaciones en Europa, cuyos costos rebasaban varios centenares de veces los ingresos de su padre.

Pero no por ello el hijo de Romero Deschamps vivió en la austeridad: en una muy opaca sociedad de papel de las Islas Vírgenes Británicas (BVI), llamada Steller Overseas Holdings Inc, Romero Durán puso 10 bienes inmuebles en México, entre ellos una casa, un exclusivo penthouse y un departamento en la Ciudad de México; cuatro casas en Naucalpan y Huixquilucan, Estado de México; otra casa en Cancún, otra en Atitalaquia, Hidalgo, y una última en Salamanca, Guanajuato.

En 2009, Steller Overseas Holdings Inc –creada ocho años antes-- tenía como beneficiarios a Alejandro Romero Durán y a una mujer llamada María Cristina Rosalía Cid Durán, y en diciembre de 2012 el hijo de Romero Deschamps se quedó como accionista único de la sociedad de papel. Esa compañía seguía activa en marzo pasado, según los documentos del registro de BVI.

La sociedad de papel no aparece en la denuncia contra Deschamps y once de sus familiares –incluyendo sus hijos Paulina, Alejandro y José Carlos Romero Durán-- que la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) presentó a la Fiscalía General de la República (FGR) el 2 de mayo de 2019.

De acuerdo con la denuncia, firmada por el propio Santiago Nieto Castillo, el titular de la UIF, entre 2012 y 2017, es decir, mientras Romero Deschamps era senador por el PRI, Alejandro Romero Durán recibió 75 millones 804 mil pesos de su padre y de la empresa Odis Asversa, S.A. de C.V., de la que era socio; aparte recibió 13 millones 644 mil pesos.

Alejandro Romero Durán ha sido socio de una empresa de taxis aéreos llamada Aeromonky Service Center, con una filial en Estados Unidos llamada Monkyair, y versiones periodísticas le atribuyen la posesión del yate “El Guly”, como regalo de su padre. Procreó dos hijos con su esposa, Jaqueline Abarca Cantoral, quienes compraron a Romero Deschamps un inmueble por 5 millones de pesos en diciembre de 2015.

Decenas de documentos vinculados con Steller Overseas Holdings y el hijo de Romero Deschamps fueron detectados por Proceso, El País, Quinto Elemento Lab y Univisión entre los cerca de 12 millones de archivos confidenciales que dieron pie a la investigación internacional Pandora Papers, coordinada por el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ).

Romero Deschamps no es el primer líder sindical “charro” vinculado con estructuras offshore con recursos millonarios en paraísos fiscales: en los Paradise Papers, otra investigación internacional que el ICIJ coordinó y publicó en 2017, Proceso y los demás medios participantes revelaron cómo Joaquín Gamboa Pascoe, el otrora secretario general de la Confederación de Trabajadores de México (CTM), tuvo sociedades de papel y cuentas bancarias en las Islas Caimán y en Bahamas desde 1982, un momento en que la industria offshore estaba en pañales.

Estas cuentas llegaron a concentrar más de 19 millones de dólares, un monto que el hombre jamás hubiera sido capaz de justificar como fruto de su labor sindical.


Triangulación de recursos

Carlos Romero Deschamps ha sido uno de los arquetipos del sindicalismo charro y corrupto de México: priista desde 1961, líder del sindicato petrolero desde 1993 –en el sexenio de Carlos Salinas de Gortari--, ha sido tres veces diputado federal y senador durante todo el sexenio de Enrique Peña Nieto, entre 2012 y 2018.

Por cierto, la UIF descubrió –y denunció-- que, de 2015 a 2018, el grupo parlamentario del PRI entregó 66 cheques a Romero Deschamps, por 10 millones 184 mil pesos.

En la denuncia de la UIF aparecen 12 personas del entorno familiar del líder petrolero y cuatro empresas: están él, su esposa Blanca Rosa Durán Limas, sus hijos Alejandro, Paulina y José Carlos Romero Durán, su hermana María Esther Romero Deschamps, sus cuñados María Guadalupe y Álvaro Durán Limas, su sobrina Ana Luisa Aguinaco Romero, su nuera María Fernanda Ocejo Garrido y su yerno Juan Carlos Rentería Covarrubias.

Según, la UIF, Romero Deschamps y sus cómplices “pusieron en marcha una elaborada mecánica destinada a introducir recursos procedencia ilícita al Sistema Financiero de nuestro país, con la finalidad de ocultar el origen y destino final de los mismos”; esta mecánica implicó transferencias de “altas cantidades” de dinero entre sí –ya sea a nivel nacional e internacional--, y tuvieron irregularidades fiscales.

Aparte, la UIF observó que, cuando abrieron sus cuentas bancarias la Blanca Rosa Durán Limas y José Carlos Romero Durán –esposa e hija del líder sindical—informaron que se dedicaban a los "quehaceres del hogar", lo que no correspondía con los montos millonarios que recibieron de empresas e integrantes de la red.

“Las operaciones que CARLOS ANTONIO ROMERO DESCHAMPS (sic) realizó con sus familiares no tienen un origen lógico ni un perfil transaccional económico, lo que desde luego revela muy posiblemente una triangulación de recursos entre el líder sindical y sus familiares, con fa única finalidad de ocultar el origen de los recursos”, planteó la dependencia.

La UIF tenía en el radar a varias empresas, como Aeromonky, Aeromonky Services, Odis Asversa, y las empresas de Estados Unidos, BC Properties V5 LLC y Three Star Corporation o Pame R&B Asociados, que relacionó con Alejandro Romero Durán. Una revisión de las actas corporativas de estas sociedades muestra que Romero Durán ha sido socio de estas empresas, excepto de Aeromonky y de Pame R&B Asociados.

En la denuncia de la UIF tampoco aparecen otras empresas de la red familiar de Romero Deschamps que encontraron los medios participantes en esta investigación, entre ellas cuatro empresas mexicanas –en Salamanca y Tula, Hidalgo--, cuatro compañías de Estados Unidos –Cablalepa Star LLC, Alerom Stars LLC, Monkyair LLC, Threepolarbears LLC-- y una en Panamá, llamada Portal Versalles 49A.

La denuncia señaló que, el 17 de diciembre de 2015, Romero Deschamps vendió un inmueble por 5 millones de pesos a sus nietos Carlos y Blanca Romero Abarca, hijos de Romero Durán.

Desde el 16 de octubre de 2019, Romero Deschamps ya no es líder del sindicato petrolero, y desde marzo de 2021 tampoco es trabajador de Pemex; durante ese año y medio, el hombre seguía cobrando su sueldo en la petrolera del Estado como “vacaciones” que, según él, no había pedido durante toda su gestión al frente del sindicato.

Arrastrando su negro historial de corrupción, nepotismo y autoritarismo en el sindicato --las evidentes operaciones de desvíos de dinero de los trabajadores de Pemex-- Romero Deschamps fue empujado a la salida por el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, que le abrió 12 carpetas de investigación abiertas desde que asumió el poder, en 2018; casi todas estas carpetas se referían a delitos de enriquecimiento ilícito.

Sin embargo, al igual que en otros casos en que el gobierno de la llamada Cuarta Transformación pretende sancionar escándalos del pasado, los casos contra Romero Deschamps se están cayendo uno tras otro. De las 12 carpetas, la FGR determinó en cuatro ocasiones el no ejercicio de la acción penal y tres veces la incompetencia; en una ocasión remitió el caso al fuero común, en otra determinó “con abstención de la investigación”, y otra quedó “en reserva”.

En el marco de estas investigaciones, Carlos Romero Deschamps, su esposa Blanca Rosas Durán Limas y su hija Paulina Romero Durán han presentado, por separado, amparos contra órdenes de aprehensión o contra el congelamiento de cuentas.

En su respuesta a una solicitud de información realizada por El País, fechada en diciembre de 2020, la FGR indicó que solo quedaban tres carpetas “en trámite”.