Los gritos en su contra comenzaron desde que se levantó para dar su discurso, de modo que la Jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, conminó a los 20 invitados especiales en el pódium a levantarse de sus asientos para colocarse detrás de él en señal de apoyo.
Detrás de él todos aplaudieron, pero ni así cesaron los silbidos.
Delgado levantó la voz en un tono poco usual para intentar detener los gritos provenientes principalmente de la parte alta de las tribuna. "¡Fuera, fuera!" "¡Traidor, traidor!", le decían.
"Hoy vivimos una transformación de verdad. Tres años luchando contra la peste de la corrupción y la cultura individualista que querían imponernos como único camino. Llevamos tres años construyendo una patria más fraterna y solidaria.
"Los conservadores desean un movimiento dividido porque saben que no pueden derrotarnos", manifestó Delgado; y desde el fondo le respondían: "¡Tú nos dividiste!".
En algún momento del discurso del dirigente morenista, de apenas 20 minutos, también comenzaron a escucharse gritos de apoyo que se transformaron luego en un "¡Obrador, Obrador!".
Mientras Delgado intentaba argumentar que la mafia de la corrupción está moribunda y que el PRIAN engendró a los cinco peores presidentes del País, desde Carlos Salinas hasta Enrique Peña, los gritos no cesaban.
El dirigente morenista manifestó que el 1 de agosto irán masivamente a la consulta para que haya juicio a ex Presidentes.
En medio de la gritería, Delgado destacó que Morena pasará de gobernar 35 millones a 61 millones de personas y que cuando le preguntó a un "experto en béisbol" sobre la elecciones pasadas, éste le contestó que había sido un triunfo de serie mundial.
"En marzo del año que entra tenemos que ganar nuevamente una contienda a la que sólo un líder con la convicción democrática de AMLO es capaz de convocar: someterse a una consulta sobre revocación de mandato. ¿Qué seríamos sin el pueblo?", planteaba, en medio de silbidos y gritos.