buscar noticiasbuscar noticias

“Alemania será un gran parámetro para saber de qué estamos hechos”

Javier Aguirre reflexiona sobre los avances del fútbol de México en su eterna búsqueda del partido de cuartos de final

Javier Aguirre ha sido un médico de urgencias para el seleccionado de México. En dos ocasiones tomó el relevo de dos entrenadores, Enrique Meza y Sven-Göran Eriksson, para clasificar a su país al Mundial del fútbol en 2001 y 2009, respectivamente. Tuvo menos de 12 meses de trabajo en ambas ocasiones. En esos dos Mundiales, su equipo fue eliminado en los octavos de final. “Perdimos la oportunidad de meternos entre los ocho mejores del mundo”, cuenta el antiguo director técnico del Atlético.

Foto: GETTY IMAGES.“Alemania será un gran parámetro para saber de qué estamos hechos”

Respuesta. Soy un convencido de que como entrenadores nuestra herramienta es la palabra y la credibilidad: es la congruencia entre lo que dices y haces. Hay que buscar la claridad si tú eres muy rebuscado o si te sorprenden en alguna incongruencia es difícil que crean en ti. Hasta la fecha soy el mismo. En una conferencia de prensa sigues defendiendo lo indefendible.

P. Usted se hizo cargo de dos generaciones de la selección de México que estaban en apuros. ¿Cómo fue trabajar a contrarreloj?

R. Los jugadores que no funcionaba, como en el 2001 y 2009, se aferraban a un clavo, confiaban en sus condiciones, pero necesitaban de tener la confianza del entrenador y escucharlo. Llamé a jugadores que a lo mejor no iban habitualmente a la selección, pero que me podían ir bien, especialmente en 2001. Cambié al 80 % de la base. En 2009 quizá fue un poco más fácil porque el antiguo entrenador era extranjero [Eriksson] y no tenía un dominio del castellano y yo, con mi forma tan primaria para hablar, pues cambió radicalmente el discurso del entrenador. No hubo muchos cambios de futbolistas, pero sí el discurso fue directo al corazón. Había que salir de ese apuro que nos encontrábamos.

P. ¿Se apoyó en ciertos jugadores para hacer buen grupo? ¿De quiénes?

R. Recuerdo a Cuauhtémoc Blanco, Rafael Márquez, Gerardo Torrado y a Óscar Pérez. Me ayudaron muchísimo en el día a día con los jugadores, con el manejo de grupo, con la dinámica del entrenamiento y funcionamiento.

P. ¿Le hubiera gustado tener un proceso largo y no tan corto con el seleccionado mexicano?

R. Es difícil porque uno no escoge cuándo ir a la selección, la selección te elige a ti. A mí me escogieron en momentos complicados para las eliminatorias. Me adapté a las circunstancias, intenté desde el primer día tapar agujeros, intenté ir a contrarreloj y lograr el objetivo de ir al Mundial. A partir del Mundial ya hablamos de otra historia. Es mucho mejor estar cuatro años trabajando con tu misma idea a estar 12 meses. Prefiero que se me den 48 meses para plasmar una idea, para ir eligiendo correctamente, para ir por etapas.

P. ¿Cuál ha sido el jugador mexicano más virtuoso que le haya tocado dirigir?

R. Habría que distinguir entre el talento natural con la pelota. Cuauhtémoc Blanco fue uno de ellos. Fue un virtuoso. Otro de gran talento natural fue Óscar Pérez, un jugador que nació para ser portero. Sin duda [Rafael] Márquez sabe jugar muy bien sin balón, tácticamente es muy eficaz, lee bien los partidos. Son jugadores que entienden bien el juego sin balón, son virtudes que a lo mejor ven, sólo aprecian a quien lleva la pelota y hace los goles. Blanco entendía muy bien el juego, vaya. Cuauhtémoc era un maestro de la gambeta, de los sombreros, un asistente natural y tenía una visión de juego impresionante.

P. De la selección actual, ¿quién le parece el más influyente?

R. La respuesta es fácil: Rafael Márquez. Tan sólo por experiencia y por los logros deportivos, su trayectoria. Rafa es el referente de este grupo. Es el pilar del equipo, no tengo la menor duda y tampoco el entrenador.

P. En México dicen que el cargo de seleccionador es uno de los más tensos y cuestionados. Incluso más que el de cualquier presidente, gobernador o alcalde. ¿Qué tan cierto es?

R. Evidentemente hay una responsabilidad social, pero hay una gran diferencia: a los gobernantes los elige el pueblo, en principio. En el fútbol no, lo elige un grupo de propietarios de equipos y lo analizan en un comité. Sí hay una responsabilidad en cuanto a tu comportamiento, a tu discurso y a tu función.




DEJA TU COMENTARIO
PUBLICIDAD

PUBLICIDAD