Abren juicio a Arturo Bermúdez ex jefe policial de Javier Duarte
A dos de los principales colaboradores del gobernador con licencia de Veracruz, Javier Duarte, se les dictaron diversas medidas cautelares y, a uno de ellos, el ex secretario de Seguridad Pública, Arturo Bermúdez Zurita, se le vinculó a proceso por los presuntos delitos de tráfico de influencias, abuso de autoridad y enriquecimiento ilícito.
Mientras que a el ex Oficial Mayor de la Secretaría de Educación de Veracruz, Gabriel Deantes, se le embargaron de manera precautoria cuatro propiedades.
Por la mañana, la juez de Control del Juzgado Segundo Penal Oral, con sede en Pacho Viejo, Estrella Iglesias Gutiérrez, vinculó a proceso legal a Bermúdez Zurita al hallar elementos suficientes para iniciar el juicio en contra del ex funcionario, así como del ex jefe de la Unidad Administrativa de la Secretaría de Seguridad, Alejandro Contreras Uscanga; y al apoderado legal de la empresa, Roberto Esquivel Hernández.
Los dos ex funcionarios fueron vinculados a proceso al considerar que se aprovecharon de sus cargos para firmar contratos para la prestación de servicios, alimentos y víveres hasta por 71 millones de pesos, a través de varias empresas. A ambos se les vinculó a proceso por los delitos de tráfico de influencias y abuso de autoridad, y al apoderado legal por tráfico de influencias.
El representante de la Fiscalía General del Estado denunció que el ex servidor público y el apoderado legal de la empresa eran socios, por lo cual la asignación de contratos fue irregular a través de empresas como Grupo Profesional Resguardado.
La juez determinó vincularlos a proceso, así como prohibirles salir del país y el pago de un millón de pesos como medidas cautelares.
El amigo de Duarte. El juez de Control, Marco Antonio Domínguez, dictó como medidas cautelares contra Gabriel Deantes —uno de los funcionarios más cercanos a Duarte— el embargo precautorio de cuatro propiedades en Xalapa —donde se ubica su megarresidencia—, el pago de un millón de pesos y restricciones para salir del país.
El representante de la fiscalía reveló que Gabriel Deantes no logró comprobar el origen lícito de más de 50 millones de pesos que acumuló en sus encargos oficiales; el ex servidor público presentó como testigo a su esposa y a un familiar más.
