350 víctimas de homicidio doloso. Azota a Veracruz la narcoviolencia
Decenas de cadáveres en las fosas clandestinas
México, D.F.
Una vez más la violencia ocasionada por el narco castiga a los veracruzanos.
En lo que va del año se han registrado más de 90 ejecuciones presuntamente vinculadas con delincuencia organizada en 30 municipios de la entidad gobernada por el priista Javier Duarte, según cifras del Ejecutómetro de Grupo REFORMA.
Decenas de cadáveres han sido encontrados en fosas clandestinas. Además se han registrado enfrentamientos armados, ataques a las fuerzas de seguridad y multiejecuciones.
Entre las víctimas del crimen organizado se encuentran políticos, policías y funcionarios federales.
Las cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública reportan 350 víctimas de homicidio doloso de enero a agosto de este año, más de 40 cada mes.
Tan sólo este martes 21 y miércoles 22, fueron ejecutadas 11 personas en los municipios de Córdoba, Amatlán de los Reyes, Iztaczoquitlán y Mariano Escobedo.
El sábado 19 fueron hallados los cuerpos de dos familiares del cineasta Alejandro Gómez Monteverde en el municipio de Pueblo Viejo, en los límites con Tamaulipas, después de haber sido secuestrados en Tampico.
El crimen causó repudió e indignación en redes sociales.
Decenas de cuerpos más han sido hallados en fosas clandestinas en el estado. El 11 de septiembre, por ejemplo, nueve osamentas fueron encontradas en una fosa en el municipio de Alvarado.
A inicios de abril, otros cinco cuerpos fueron exhumados de una fosa en un predio cercano al puerto de Veracruz. Y el 28 de abril, los cadáveres de dos trabajadores de la CFE fueron hallados en otro cementerio clandestino en Cosamaloapan.
Ataques a las fuerzas de seguridad también reflejan los niveles de violencia en el estado gobernado por Duarte.
En junio, el Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG) difundió un comunicado en el que aseguraba que en el puerto de Veracruz, Boca del Río y Medellín ya no operaban los de la letra y advirtió una “limpieza” de ese grupo.
De acuerdo con documentos de la PGR y la DEA en la entidad operan los de la letra y el CJNG.
Esos informes refieren que los sicarios de la letra cuentan con dos células que operan en el centro del estado y en los límites con Puebla, y otra que tiene presencia en la zona de Poza Rica y en la huasteca veracruzana.