Temen una epidemia global de fiebre
Agosto 17, 2016 -
Ante la amenaza de una epidemia global, la República Democrática del Congo (RDC) hace un último esfuerzo para detener la propagación de la fiebre amarilla a Kinshasa y, así, otros países.
La medida, informa The Guardian, consiste en usar vacunas contra la fiebre amarilla, las cuales sólo serán la quinta parte de la dosis normal. Si se desata la epidemia en Kinshasa, ciudad de 10 millones de habitantes, se teme que los mosquitos transmisores lleven la enfermedad a otras regiones más allá del centro de África.
Esta acción, que comienza el martes, es en resultado a que la reserva de vacunas, las cuales se aplican desde enero de este año, está baja.
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Se han administrado 19 millones de vacunas, sin embargo, sólo quedan 5 millones. El problema aumenta con el hecho de que toma cerca de un año preparar más de estas vacunas.
“Nos tiene increíblemente preocupados”, destacó Ruairidh Villar, de Salven a los Niños, a The Guardian, “Justo mandamos a un equipo de emergencia a la República Democrática del Congo para apoyar una última campiña de vacunación antes de que el brote llegue a Kinshasa.
“Nuestro temor es que es probable de que se haga (un asunto) global si no podemos pararlo rápidamente y si llega a la ciudad”.
En Angola, país al sudoeste de RDC, se sospecha que hay cuatro mil casos de fiebre amarilla, de los cuales 879 se han confirmado; en RDC se cree que hay 2 mil 200 casos, de los cuales sólo han podido confirmar 68.
Entre ambos países se han registrado 400 muertes por la fiebre amarilla.
“Los primeros casos de fiebre amarilla se dieron en diciembre de 2015 y confirmados en enero”, señaló Joanne Liu, presidente internacional de Médicos Sin Fronteras. “Las primeras vacunaciones empezaron unas semanas después, pero pudieron haberse hecho antes”.
El mandatario de la organización humanitaria agregó que para tomar acciones ante este tipo de situaciones se necesita la voluntad de las autoridades, y usó los brotes de Ébola como ejemplos de la importancia de responder rápido a este tipo de situaciones.
Una campaña masiva de vacunación inmunizó a 200 mil personas, pero no detuvo la propagación, la cual se da con el mismo mosquito que transmite el Zika, el Aedes aegypti, y se planea una nueva campaña en las entidades fronterizas con Angola, donde supuestamente se originó el brote.
Ahora, se teme que con la época de lluvias en septiembre el mosquito pueda propagar más rápido y en mayor volumen a la enfermedad.