Editoriales > FONDO Y FORMA (ABEL OSEGUERA KERNION)

PRIAN

Hace tiempo un viejo amigo colmado de sabiduría

Hace tiempo un viejo amigo colmado de sabiduría, me dio un consejo ante ciertas dudas que tenía sobre la perspectiva de una situación. Me dijo: “Si es pájaro, tiene pico de pato, patas de pato, plumas de pato y hace cuac cuac, no te hagas bolas; es un pato.” 

Por eso tras el arresto de Javier Duarte, la denuncia del gobernador panista de Veracruz, Miguel Ángel Yunes sobre los supuestos sobornos en favor de AMLO por parte del detenido, y las declaraciones de Ochoa Reza, no dejan duda alguna de que el PAN y el PRI están alineados en el mismo sentido y no sólo eso, sino además lo vertido por Calderón refuerzan la idea de una estrategia dirigida desde la mente maquiavélica de Salinas para apuntar toda la artillería contra AMLO y Morena.

PRIAN

La semana pasada se coló a los medios una instrucción en forma de boletín a los miembros del PAN para enfocar todas las baterías contra Morena y AMLO en base a esa mentira que piensan repetir mil veces hasta que se convierta en verdad. Josefina la acató inmediatamente, junto a su mentor Felipe Calderón. 

Pero ahora esta carta que da instrucciones claras de crear una guerra sucia, contraviniendo lo ideales democráticos de Gómez Morín o Manuel Clouthier para enlodar un proceso electoral en aras de intereses de unos cuantos o peor aún por el arrebatamiento del poder, por el poder mismo, sin afanes republicanos y menos democráticos, se le suma una filtración del mismo Calderón cuando ejercía la presidencia en favor de exonerar a Humberto Moreira de todos sus desfalcos al Estado de Coahuila. 

De tal manera que tenemos un partido político que bajo el ejercicio del poder genera pobreza, persigue periodistas, inventa crímenes a sus adversarios políticos, encubre criminales, como Moreira y las primas del ABC, lleva a cabo fraudes electorales, elecciones de estado, invita a países extranjeros a intervenir en las elecciones, calumnian, saquean el erario, convierten al país en un cementerio y además tienen la desvergüenza de buscar la reelección a través de un familiar, definitivamente es igual que el PRI. No hay diferencia; es un pato. Es el PRIAN. 

Es una verdadera vergüenza en lo que se ha convertido el partido que luchó por la democracia por décadas. La corrupción penetró  hasta su médula, la hipocresía en su corazón y la desvergüenza está en su piel.