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Pluralismo político

Es indiscutible el hecho de que nos encontramos inmersos en un proceso electoral que de haber iniciado a principios de septiembre con las primeras fases de planeación ahora se encuentra prácticamente en la etapa de eliminatorias (No en tiempos y formas oficiales), en la cual los diferentes actores políticos de todos los partidos, se dan a ver de diferentes maneras para lanzar el mensaje a la población de que ellos quieren llegar a convertirse en candidatos ya sea a la gubernatura, a una alcaldía o a una diputación.

Es indiscutible el hecho de que nos encontramos inmersos en un proceso electoral que de haber iniciado a principios de septiembre con las primeras fases de planeación ahora se encuentra prácticamente en la etapa de eliminatorias (No en tiempos y formas oficiales), en la cual los diferentes actores políticos de todos los partidos, se dan a ver de diferentes maneras para lanzar el mensaje a la población de que ellos quieren llegar a convertirse en candidatos ya sea a la gubernatura, a una alcaldía o a una diputación.

El universo político multicolor está más que a la vista del electorado. Desde los partidos de izquierda que han dividido la potente fuerza que hace apenas algunos años mostraban cómo un partido casi hegemónico en las siglas del entonces potente PRD y que ahora se dividen en tres en las siglas del mismo PRD, de Morena y de Movimiento Ciudadano. 

Pluralismo político

Reza el viejo adagio popular: “Divide y vencerás”, y esta división de la izquierda mexicana se muestra como ejecutada por los mismos integrantes de ese extremo del espectro político nacional más que por alguien externo; se están haciendo el  “Harakiri”, con la única diferencia que el harakiri como tal es la descripción del código ético de los samuráis y se realizaba de forma voluntaria para morir con honor. En el caso de la izquierda el “harakiri” como tal está deformado en su concepto ya que se están “matando de forma voluntaria pero no por honor, sino por la incompetencia, la intolerancia y la testarudez de quienes la integran. 

El albiazul PAN que representa la derecha política mexicana, no está cantando mal las rancheras, sin extendernos tanto en el análisis, podemos ver como en Tamaulipas existe una marcada división entre el grupo político del senador Francisco Javier García Cabeza de Vaca y los alcaldes Leticia Salazar de Matamoros y Carlos Cantú Rosas de Nuevo Laredo. Vaya, hasta se habla de que Leticia podría, de no ser seleccionada por el PAN, abanderada por Movimiento Ciudadano y hasta lo mismo se rumora de Carlos Cantú Rosas y la IDEOLOGÍA de los partidos a los cuales “pertenecen” ¿Dónde quedo?, sí así traicionan esa ideología, ¿Cree usted que no traicionaran a sus representados de poder llegar a convertirse en candidatos?

Y así, guste a quien le guste o no le guste a quien no le guste, estas situaciones arriba descritas vienen a fortalecer al partido que se ha estado mostrando más institucional: El PRI.

Con todo y las acusaciones contra algunos prospectos priístas de nexos con el crimen organizado como se especula en las redes sociales acerca de Baltazar Hinojosa Ochoa quien quiere la candidatura a la gubernatura, o acusaciones de actos anticipados de campaña contra Alejandro Guevara Cobos por sus espectaculares por las ciudades más importantes del Estado entre otras situaciones, el tricolor ha mostrado que su institucionalidad lo lleva a salir fortalecido ante la división de fuerzas de sus adversarios políticos.

El ingrediente que pondría un “sabor” especial a este proceso electoral será el de la figura de los candidatos independientes. Así tenemos en Reynosa a un José Ramón Gómez Leal, a un Alfonso de León Perales que saldrían al escenario electoral sin partido alguno, y si logran capitalizar el hecho de que la ciudadanía está cansada de la partidocracia, entonces podrán llevarse una buena tajada del total del pastel que representa los votos que serán emitidos en la jornada electoral de junio del 2016.

En Río Bravo, un político de cepa, de los que desde siempre han mostrado su vocación por el servicio público, como lo es Anwar Vivián Peralta, quien se perfila como un fuerte aspirante a una candidatura independiente para contender por la alcaldía, se encuentra bastante activo liderando a un grupo de ciudadanos que se ha dado a la tarea de llevar a cabo una serie de brigadas de asistencia social que comprenden la atención médica, jurídica, psicológica, terapia física, corte de cabello y dental.

Cabe mencionar que este tipo de actividades las realizan no de ahora sino desde años anteriores y cuando digo años anteriores, no son el pasado y el antepasado, me consta que desde que Anwar contaba con escasos 15 años de edad, ya realizaba este tipo de actividades apoyando a grupos de ciudadanos que se daban a la tarea de apoyar a la comunidad riobravense.

No lo pierda usted de vista estimado lector, su muy posible candidatura independiente a la alcaldía, pondría al rojo vivo la jornada electoral del 2016.

El sistema político que rige a nuestro país es la democracia, la cual se define como aquella que defiende la soberanía del pueblo y el derecho del pueblo de elegir y controlar a sus gobernantes.

En toda democracia, la pluralidad de ideas, de ideologías, es inevitable y de hecho enriquece y proporciona los contrapesos políticos para evitar el que se caiga en una dictadura o tiranía.

Lo descrito en los párrafos anteriores muestra un pluralismo político.

La madurez democrática de un país se mide por el grado de respeto, de tolerancia y de profesionalismo en el activismo político, así como la capacidad de las fuerzas para llegar a acuerdos que promuevan el bienestar general.

Esperemos que en este y los subsecuentes procesos electorales se alcance una cada vez mayor madurez democrática por el bien de todos como mexicanos.

Como versa un viejo adagio judío: “Si todos tiráramos en la misma dirección, el mundo se volcaría”.

He ahí la importancia de contar con un pluralismo político.

Hasta la próxima, primeramente Dios.

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