¡Recáspita!… el PRI hablando de fraudes

Pues llegaron más marinos a nuestra querida Reynosa con el obvio propósito de reforzar el combate a la delincuencia.

Menciona la información que viene también personal con conocimientos en las acciones de inteligencia que no es otra cosa que primero informarse en dónde están los problemas o lo que es lo mismo, en dónde se localizan o se mueven los malandros y después atacar esos puntos.

Como es natural, la información alienta expectativas porque en nuestra querida Reynosa ya traemos el agua hasta el cogote. Vivimos en medio de una violencia ininterrumpida desde que eliminaron a un cabecilla criminal que de eso va ya más de un mes y los balazos siguen escuchándose.

Por lo mismo se espera que con las modificaciones que seguramente habrá en la estrategia los resultados comiencen a verse y sobre todo a sentirse.

Los comercios locales también ya están al borde de la ruina ante la notoria escasez de clientela. La gente tiene el ánimo alterado, no es cosa de salir a echarse unos tacos por la noche como era la tradición sin saber que a lo mejor no llegas o tal vez no regreses, por lo que sería toda una ironía que mientras experimentas el placer de embuchacarte unos de carne asada o de trompo un pelotazo te abra la barriga y por ahí se te va la comida y de pasada la vida.

El tema es serio pero ya mejor lo tomamos en broma, si no vamos a terminar convertidos en amargados o a desconfiar hasta de nuestra propia sombra. Cuando salimos a la calle ya parecemos conejos asustados y esto tiene que terminar. No es posible esta vida.

Se reconocen los esfuerzos del Grupo de Coordinación Tamaulipas y los riesgos que asumen en sus labores de vigilancia, pero el ciudadano común ya está en sus límites. 

Hay que echarle porras y rezar por los que tienen en sus manos la tarea de pacificar nuestra querida Reynosa, que será incompleta si nosotros no aportamos la parte que nos corresponde.

Y de esto habló recientemente MAKI ORTIZ. Precisó la necesidad de crear un ejército social que asuma el compromiso de trasmitir valores, principios y todo aquello que genere armonía en la ciudad.

Hay que atender su recomendación porque este problema no se va a resolver solamente a punta de balazos. Ya lo hemos visto durante diez años y como que ya es tiempo de entender que por ahí no va la cosa.

Y siguiendo con recomendaciones, el diputado local por Nuevo Laredo, CARLOS GERMÁN DEANDA HERNÁNDEZ se reunió con funcionarios de las finanzas de los 43 municipios, a quienes mediante una plática les recomendó que fueran más eficientes en la recaudación para ya no depender de los apoyos federales o estatales.

Sugirió que hay tres rubros en donde no se cobra debidamente o con eficiencia como el de recolección de basura, que vendría a tapar los boquetes financieros del municipio.

Y tiene razón, nomás que en el caso de Reynosa el Ayuntamiento pretendió un cobro por ese servicio y entre una facción del ayuntamiento y la totalidad de los diputados locales echaron abajo esa iniciativa.

Tal vez ahora que el Presidente de la Comisión de Desarrollo Urbano y Puertos del Congreso del Estado promueve este cobro, el Municipio de Reynosa podría poner sobre el tapete nuevamente su proyecto y ahora a lo mejor los diputados, incluidos los de Reynosa, que fueron los más feroces opositores a ese cobro, ya no se lo van a vetar, es cuestión de intentarlo.

Otro rubro es el de la plusvalía de los terrenos que en un pasado eran suburbanos y algunos hasta rurales y por el crecimiento de las ciudades hoy son urbanos donde ya llegaron los servicios públicos sin costo alguno para los dueños de esos predios que aumentaron su valor y no les están cobrando impuesto por ese beneficio.

Y también habló de la necesidad de cobrar el servicio de alumbrado público.

Claro que estas propuestas a no pocos les parecerán inadecuadas por la difícil situación económica porque por la que atraviesan la mayoría de los mexicanos, y los reynosenses, con todo y tener una economía en constante movimiento no son la excepción. No se puede ignorar que la mayor parte de la gente productiva se ocupa en maquiladoras en donde pagan el salario mínimo, que si no fuera por las compensadas que les dan por el tiempo extra y vales de despensa esto estaría ardiendo.

Entonces, sin soslayar esas circunstancias, las recomendaciones del legislador neolaredense son buenas pero deberán ser equitativas para evitar pilladeros. No es cosa de cobrarle lo mismo a un fraccionamiento habitado por personas de altos recursos que en uno de clase media y no se diga de clase popular.

Y por hoy, BASTA.

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