PRD, el declive

El siglo XX se enfilaba hacia su última década, la sociedad mexicana elevaba cada vez más su voz para demandar del gobierno federal, que hasta esa fecha se había caracterizado por ser siempre priísta, el que se dieran los pasos necesarios para que la democracia se pudiera ejercer con las garantías de la verdadera libre elección por medio del sufragio, el cual se presumía, por lo general acababa en un fraude electoral. La sociedad así demandaba una mejor distribución de la riqueza, una mayor y mejor implementación de programas sociales de calidad y una verdadera democracia.

Es así como destacados personajes del escenario político nacional como lo son Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, Porfirio Muñoz Ledo, Ifigenia Martínez, entre otros miembros históricos de la izquierda como Heberto Castillo, Gilberto Rincón Gallardo y Amalia García, logran capitalizar estas demandas sociales y fusionan los movimientos de los partidos socialistas existentes en la época para formar así el Partido de la Revolución Democrática (PRD) un 5 de mayo de 1989.

Ocho años después de su fundación un candidato emanado del PRD ganaba la elección en una entidad federativa, así Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano ganaba la elección para ser Jefe de Gobierno del entonces llamado Distrito Federal, corría el año de 1997.

A partir de ahí, comienza a surgir la figura de manera relevante de Andrés Manuel López Obrador cuando el 6 de julio del año 2000 gana la elección para convertirse en Jefe del Distrito Federal, nacía así la figura de quien le daría fuerza postrera al PRD que por dos sexenios llegó a consolidarse como la segunda fuerza política del país.

Es el 9 de septiembre de 2012 cuando Andrés Manuel López Obrador anuncia su ruptura con el PRD para formar lo que hoy es el partido político que hoy lidera y al cual conocemos como MORENA; iniciaba con este hecho el declive del entonces poderoso PRD quedando así de manifiesto, que quien en realidad le daba fuerza a la izquierda mexicana era el liderazgo de un hombre llamado Andrés Manuel López Obrador.

En Tamaulipas el PRD y el movimiento Lopezobradorista nunca representó una mayoría significativa y es ahora en estos tiempos cuando nos enfilamos hacia lo que es el inicio del proceso electoral 2017-2018 que se puede sentir en el ambiente político local esa enorme debilidad del PRD al ya no contar con AMLO en sus filas.

De hecho, es AMLO quien ahora con MORENA comienza en lo local, es decir en nuestro Estado, a crecer ya que integrantes de otros institutos políticos e inclusive algunos independientes se han declarado a favor de este.

Así es, con esto queda evidenciado que es, hasta ahora, la izquierda mexicana la de un solo hombre: AMLO, a donde va él se van los votos por la izquierda, y la soberbia y el hambre de poder y riqueza personal de quienes lideran ahora el PRD son los factores adicionales que están acabando por “empinar” a ese partido otrora mente poderoso como lo es el PRD.

Hasta la próxima, primeramente Dios.

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