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Enfrentamiento deja 2 muertos, en Sabinas Hidalgo, Nuevo León

Una persecución y enfrentamiento a balazos registrados ayer en Sabinas Hidalgo, entre policías estatales de Fuerza Civil y civiles armados, dejó como saldo a dos presuntos delincuentes abatidos en dicho poblado del norte de Nuevo León.

Monterrey, N. L.

VIOLENCIA. En Sabinas Hidalgo, Nuevo León, oficiales estatales de Fuerza Civil participaron en un enfrentamiento y abatieron a dos civiles armados que viajaban en una camioneta.Enfrentamiento deja 2 muertos,en Sabinas Hidalgo, Nuevo León

Precisaron que en el lugar murieron dos supuestos integrantes de un grupo delictivo y se efectuó el aseguramiento de una camioneta, un fusil AR-15, otro AK-47, y diversas evidencias.

Señalaron que los cuerpos de los fallecidos, no identificados, quedaron tendidos -empuñando las citadas armas-, a un lado de la unidad, marca Chevrolet, roja.

Al parecer, agregaron, los ahora occisos eran los únicos ocupantes de la camioneta, de cabina sencilla.

Más tarde, el comisario en jefe de Fuerza Civil, Felipe de Jesús Gallo, confirmó en su cuenta de la red social Twitter la movilización policíaca.

Especificó que “compañeros de Fuerza Civil abaten a dos delincuentes en Sabinas Hidalgo después de una persecución, se aseguran armas y un vehículo”.

PRECISAN LOS HECHOS

Fuentes policiacas señalaron que inicialmente los aparentes sicarios circulaban en la camioneta, sin placas, por Sabinas Hidalgo, donde los oficiales realizaban labores de patrullaje y les marcaron el alto.

Añadieron que como respuesta, los agresores dispararon en contra de los policías y estos repelieron el ataque, para luego iniciarse una persecución que culminó en las calles antes mencionadas.   

Las fuentes revelaron que el pasado jueves las mismas autoridades capturaron a un delincuente armado, como posible participante en el reciente ataque contra oficiales de Fuerza Civil, en los límites del aledaño poblado de Vallecillo y Nueva Ciudad Guerrero, Tamaulipas.

El suceso violento ocurrió el pasado 4 de mayo, tras una persecución en los límites del poblado del norte de la entidad y la frontera ‘chica’ tamaulipeca, donde uno de los elementos nuevoleoneses pereció baleado y varios de sus compañeros fueron privados de la libertad.

Posteriormente, elementos policiacos tamaulipecos y militares rescataron a los oficiales cautivos, según informes oficiales.

De manera extraoficial trascendió que los autores del ataque sólo mantuvieron como rehén a una mujer policía de Fuerza Civil, a quien llevaron a un campamento de la delincuencia para luego liberarla y llegar ésta a Parás, Nuevo León. 

Los hechos provocaron supuestas reacciones de rechazo de personal de la corporación estatal que en redes sociales denunció la falta de armamento y unidades, y demandó el cese del jefe de Fuerza Civil, Felipe de Jesús Gallo.

No obstante, Gallo y demás funcionarios del Gobierno de Nuevo León negaron lo anterior y sostuvieron que fue una estrategia de la delincuencia organizada para disuadir el combate a la misma.



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