Cuenca de Burgos puntal de Reynosa

Desde 1993, el Activo Integral Burgos (AIB) es el administrador de la región productora de gas más importante de México, donde se encuentran las cuencas de Burgos y Sabinas. Originalmente en la República Mexicana, la actividad petrolera se dividió en tres zonas geográficas por Pemex: Sur, Centro y Norte. Estas zonas a su vez se subdividieron en distritos, siendo el más grande del país el Distrito Frontera Noreste (DFNE), teniendo como cabecera la ciudad de Reynosa, Tamaulipas desde la década de 1940. DFNE y AIB han administrado la explotación, perforación y extracción de gas por 70 años de la franja  fronteriza. El distrito abarcaba en el poniente desde la Baja California hasta el Golfo de México en el oriente, pero su aprovechamiento se concentró en las dos cuencas mencionadas.

aprovechan venta los texanos

Los materiales geológicos de cada época sobresalen en el lomerío que se observa cuando uno viaja de Reynosa a las faldas de la Sierra Madre.  Estas unidades sedimentarias de dicho período geológico, que se empalmaron unas arriba de otra, están representadas por areniscas, arcillas y lutitas entremezcladas en un ambiente marino y continental, indicándonos una continua regresión marina durante su formación. 

De la ciudad de Reynosa hacia el litoral costero se encuentran sedimentos  principalmente de arcillas y arenas del período Cuaternario que abarcan una tercera parte de la Llanura Costera que corre adyacente al Golfo de México. Debajo de la llanura se encuentra oculta la estructura compleja de la Cuenca de Burgos, una provincia geológica terciaria de secuencia sedimentaria; sus cimientos ocultan los hidrocarburos de la región.

Actualmente esta zona rica en gas no asociado abarca una parte de los estados de Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas. Compañías petroleras extranjeras asociadas con la explotación temprana del subsuelo texano a principios del siglo XX participaron en la aprovechamiento de hidrocarburos en ambos lados de la frontera, entre los Estados Unidos y México.

Una de las primeras compañías en perforar del lado americano fue la Texas Fuel Oil Company, que posteriormente se conocería como Texaco.  Una de sus subsidiarias fue la Border Gas Company que ya trabajaba para finales de la primera década del siglo XX, tanto en Texas como en los terrenos de la Hacienda la Sauteña, en lo que actualmente es el municipio de Río Bravo. Desde finales de la primera década del siglo XX hasta 1927, se tiene un registro de más de mil 700 pozos en los condados americanos al noroeste de Reynosa.

los primeros reclamos

Documentos fechados de 1928 a 1935, de la Serie de Juzgados del Archivo Municipal de Reynosa (AMR), registran la presencia de compañías petroleras en la región tales como: Titania S. A.; Pierce Oil; Compañía Explotadora y Fraccionadora del Valle del Bajo Río Bravo, S. C. P.; La Imperial, S. A.; Compañía Transcontinental de Petróleo, S.A.; Sheldon and Burden Co. Esta última compañía tenía su campamento en el rancho el Jabalí al poniente de Reynosa. En 1931 los obreros de esta corporación la llevaron ante la Junta Municipal de Conciliación y Arbitraje de Reynosa.

Un documento interesante de la Serie de Comunicaciones de Presidencia en el AMR menciona la participación del impuesto federal que se le entregó al municipio de Reynosa de fondos petroleros que fueron recaudados en el semestre, entre octubre de 1934 y marzo de 1935.

De los 15 estados participantes, Tamaulipas era el que recibía la mayor aportación de impuestos federales petroleros y de un centenar de municipios de la República, Reynosa obtenía la mayor cantidad de ingresos por este concepto.

producen gas en abril de 1943

En los siguientes años las situaciones irreconciliables entre los obreros y las compañías petroleras extranjeras pusieron en peligro la estabilidad económica del país, por lo que el Presidente Lázaro Cárdenas del Río se vio obligado a decretar la expropiación de 16 compañías petroleras. A las 22 horas del 18 de marzo de 1938, el presidente anunció por radio la nacionalización que reafirmaba los principios revolucionarios de la soberanía nacional. Esto llevó a la creación de la paraestal Petróleos Mexicanos.

La actividad petrolera regresó a la Cuenca de Burgos hasta la década de 1940. El primer pozo que se perforó fue el Misión Número 1, el 4 de abril de 1944. Éste se encuentra al suroeste de la actual comunidad de Reynosa Díaz, en lo que eran  los terrenos de la antigua misión de indios San Joaquín del Monte. El personal de Pemex provenía de Poza de Rica, Veracruz de la sección 30. Entre los perforadores se encontraban Timoteo Guerrero y Héctor Mendoza  originarios de Veracruz y los reynosenses Lorenzo y Arnulfo González (Los Búfalos), según datos proporcionados verbalmente por don Rigoberto de la Viña. Después de un año de trabajo el pozo empezó a producir gas el 3 de abril de 1945. 

Surgieron descubrimientos de otros yacimientos de gas natural y condensado, principalmente en los campos Reynosa (1948), Brasil (1948) y Cano (1949). Éstos fueron localizados entre 1,400 a 2,300 metros de profundidad. Esto permitió tener un mejor conocimiento geológico para las futuras exploraciones que pronto se extendieron en dirección de Nuevo Laredo. 

* Antropólogo. Cronista Municipal de Reynosa

Texas, entre primeros clientes

Según la Revista Nacional (Magazine del Norte de México), en su edición especial de 1949 sobre el bicentenario de la fundación de Reynosa, el subsuelo trajo una transformación que pronto reveló beneficios de carácter económico para la región. 

En ese momento se perforaban varios yacimientos petroleros: los pozos 7, 10, 12, 14 y 15, en el campo Reynosa, siendo éste el más grande y productivo de la región, trabajando al mismo tiempo los pozos 1 en el campo Cano, el pozo 2 en el campo Brasil y los pozos 1 y 2 en el campo 18 de Marzo. 

En ese año laboraban alrededor de mil trabajadores en los campos de Reynosa.

En sus inicios la producción de gas natural  de la zona se exportó directamente al estado vecino de Texas, mediante un gaseoducto que conectaba a Reynosa con el mercado norteamericano. 

El Distrito Frontera Noreste se vio en la necesidad de crear plantas para el aprovechamiento del gas no asociado y húmedo de la cuenca. Durante las décadas que siguieron la producción petrolera evolucionó la economía de la región. 

A partir de la segunda parte del siglo pasado la ciudad de Reynosa obtuvo un cambio económico, político y social.

RIQUEZA DEL SUBSUELO. Desde hace más de 70 años han sido descubiertos yacimientos de gas natural en el municipio.