buscar noticiasbuscar noticias

¡Aguas!, dicen a empresarios si Donald Trump gana elección en EU; En riesgo el TLCA

México tiene que estar preparado para moverse dentro de distintos escenarios

¡Aguas!, dicen a empresarios si Donald Trump gana elección en EU; En riesgo el TLCA

gilberto.banda@elmanana.com

México, sus sectores industriales y económicos deberán de estar al tanto de la posibilidad de que el candidato Donald Trump –principalmente-, sea el ganador de las elecciones a efectuarse en Estados Unidos en noviembre próximo y posicionarse al respecto, ya que, las declaraciones de él – Donald Trump-, no presagian una continuidad al Tratado de Libre Comercio (NAFTA) firmado con México y Canadá ni tampoco, una mejora al trato a los trabajadores y comunidad mexicana que radica en ese país.

En México, señala el consejero nacional de la Canacintra, Federico Alanís Peña, el empresariado se hace varios cuestionamientos al respecto y algunos de éstos son los siguientes, para los cuales, se establece un posicionamiento:

1.- ¿Cómo afectaría la relación comercial con EU, si Donald Trump ganara las elecciones Presidenciales en Estados Unidos?

Primeramente, México tiene que estar preparado para moverse dentro de distintos escenarios en un mundo globalizado en donde está inmerso y seguirse desarrollando para crecer, independientemente de quien sea el próximo presidente o presidenta del país vecino al norte.

La ciudadanía norteamericana y nadie más –incluída lo correspondiente de origen latinoamericano que radica en los Estados Unidos-, decidirá quién va a ser su próximo (a) dirigente.

México siempre se ha distinguido entre los países del mundo por el respeto al derecho ajeno y tendrá que ser reciproco de lo que los ciudadanos norteamericanos decidan y de no intervenir y corresponder siempre con el uso del respeto y derecho internacional si este se requiere.

Se recomienda ser muy cautelosos ante las expresiones y ofertas de cualquier candidato (a), para no caer en el juego que regularmente recurren muchos candidatos (as) en cualquier parte del mundo.

México actualmente, tiene una alta exposición a los flujos de inversión e intercambio de negocios y productos con los Estados Unidos de Norteamérica; por lo que, se hace necesario estar preparados ante cualquier eventualidad; es decir, tener un plan alterno si es el caso.

Y este cuidado o preparación obedece, porque México se categoriza a la fecha con sus 22 años de haberse firmado el TLCAN, como el segundo socio comercial de los Estados Unidos de Norteamérica, después de Canadá y por arriba de China. Existe un flujo comercial diario –productos e inversiones-, entre los Estados Unidos de Norteamérica y México que asciende a cerca de un mil 500 millones de dólares, por lo que, una salida del TLCAN de nuestro país no solo afectaría a éste, sino que, también a los Estados Unidos de Norteamérica.

En definitiva y sin duda alguna, una cancelación o una reversión del Tratado de Libre Comercio ocasionaría un daño considerable a México por el grado del avance ya logrado; sin embargo, no debe ser un tema que, aunque importante para nuestro país, no debe quitar el sueño de los fabricantes y empresarios mexicanos, sino por el contrario, debe considerarse como un reto a superar con arduo trabajo.

En cualquier región o país del mundo –incluido nuestro país-, existen inconformidades de la población por las promesas incumplidas por los gobernantes salientes de cualquier periodo de gobierno, y por ello, siempre habrá quienes a través de su voto esperan un cambio con el deseo y la esperanza de que se corrijan las condiciones que no les cumplieron y de ello, se aprovechan los candidatos para atraer y sumar votantes, aunque lo que proclaman hacer no lo hagan finalmente al llegar a su objetivo, si lo logran.

Y podemos citar un ejemplo: el candidato republicano se ha pronunciado que de llegar a la presidencia cancelaría el TLC con México y después de esto, aplicaría un impuesto del 35 por ciento a los aranceles de los productos que México actualmente exporta a ese país. Y allí no queda todo, porque, además, ha amenazado de también imponer un impuesto hasta del 45 por ciento a los productos chinos y finalmente salirse de la Organización Mundial de Comercio (OMC).

Esta incertidumbre y promesas que provocan los candidatos, regularmente inhibe en un principio algunas inversiones o frena el comercio, etc., pero en definitiva, la población madura tendrá que ir actuando gradualmente a través de sus congresos para alinear el actuar de cualquier dirigente que se quiera salir del camino del progreso democrático o de cualquier acuerdo o tratado firmado con anterioridad con otros países, si este fuera el caso.

Por cierto, algo que a la fecha el actual gobierno demócrata ya está realizando, es germinando en sus adquisiciones el esquema que se conoce como “BUY AMERICAN”, donde se da preferencia a los productos hechos en USA sobre cualquier otro de procedencia extranjera – incluido los hechos en México- y que seguramente una de las primeras acciones que aplicaría el actual candidato del partido Republicano – por lo expresado por él-, sería intensificar dicho esquema; es decir, con cualquiera de los dos candidatos Demócrata o Republicano, los productos mexicanos están y estarían siempre en el riesgo de ser desplazados por los hechos en los Estados Unidos.

En este rubro, es imperante que los productos mexicanos que se exportan actualmente y que actualmente se consumen en los Estados Unidos, deben seguir siendo competitivos en precio, en calidad, en cumplimiento de las normativas nacionales e internacionales, contar con certificados de calidad, etc.

2.- ¿Habría presión sobre la paridad peso–dólar si el candidato republicano ganara las elecciones presidenciables en USA?

En un mundo globalizado, las paridades cambiarias siempre resultan con afectación o responden a ciertos eventos que se presentan. Hoy, aún no hay una decisión sobre quien será el próximo presidente o presidenta de Estados Unidos y ya México ha tenido durante todo este año variaciones drásticas cambiarias interbancarias (spot) peso dólar que han alcanzado hasta los 19.86 pesos por dólar después de haber iniciado en enero 2016 desde 17.36 pesos por dólar. Lo vivido hasta hoy, muestra que existe una parte proporcional desfavorable sobre el deslizamiento de nuestra moneda ante el dólar estimada – porque nadie la puede asegurar-, entre un 15 y un 20 por ciento sobre la paridad actual, si el candidato republicano resultara ganador debido a su posicionamiento sobre México y su población.

3.- ¿Cuánto exporta México a los Estados Unidos de Norteamérica?

A la fecha, cerca del 83 por ciento de las exportaciones mexicanas están dirigidas hacia Estados Unidos y este nivel debe de conservarse o inclusive incrementarse independientemente de que partido – Republicano o Demócrata-, esté en el gobierno del país vecino. De estas exportaciones, el 27.3 por ciento han sido realizadas por el sector Automotriz y el restante 55.29 por ciento por otros sectores.

Gran parte de estas exportaciones están destinadas principalmente hacia el Estado de Texas, California, Arizona y Nuevo México.

4.- ¿Qué escenario prevén los industriales mexicanos y cómo están trabajando desde ahora para no ser afectados o al menos resultar lo menos afectado si el candidato republicano lograra la presidencia y en cierto grado trabajara en cumplir lo por el expresado hasta hoy?

México y su industria podrán conservar o aumentar sus niveles de exportaciones a ese país, siempre y cuando éstas- las exportaciones-, cumplan con las normativas y regulaciones de todo tipo que se han establecido dentro de las reglas del comercio contempladas en el Tratado de Libre Comercio (NAFTA), una de las zonas de libre comercio más importantes del mundo con el 28 por ciento del PIB mundial.

Si los exportadores mexicanos cumplen cabalmente con los lineamientos del NAFTA, no tienen por qué preocuparse y si así fuera el caso, el gobierno mexicano debería de intervenir en favor de estos y en particular, la Secretaría de Economía, a través de su Unidad de Prácticas Comerciales Internacionales (UPCI), unidad la cual, ya debe de estar preparada para cualquier situación ya que, hacer a un lado el TLCAN ocasionaría un desorden a las cadenas productivas de la economía – nada deseado-, tanto a Estados Unidos, Canadá y México.

Se debe dejar al tiempo y a los resultados y no provocar enfrentamientos desde ahora, para actuar dentro de las normativas internacionales de comercio que marca OMC y si a México le solicitan re ajustar o negociar o actualizar el Tratado existente, habrá que analizar inteligentemente dicha solicitud y proceder firmemente como mejor convenga a nuestro país.

Y si dentro de este esquema se afecta o se quiera afectar negativamente el dinero que nuestros compatriotas envían a México dentro del concepto de remesas, México no debe permitir que esto suceda; si es que, quien resulte electo como desea bloquear las remesas o de ellas cobrarse la construcción de un posible muro fronterizo o hacer él envió de remesas más costo para nuestros conciudadanos.

Muy seguramente el ahora candidato del Partido Republicano insistirá en incluir en su plataforma electoral, la construcción del tan comentado muro fronterizo, una mayor dureza o restricciones hacia los inmigrantes mexicanos indocumentados y sus remesas, y muy posiblemente unas modificaciones o ajustes al TLCAN.

Por el lado de México y de quien llegue a la Presidencia de Estados Unidos, es trabajar realmente en un conjunto de Leyes y Reglamentos que conformen y se concreten en una Reforma Migratoria que regularice a los indocumentados y en particular a los de habla hispana ya que, de esta manera habría una seguridad jurídica para todos.

También vale la pena recordar que, junto con Canadá y Estados Unidos nuestro país también integra el grupo de países del Acuerdo de Asociación Transpacífico (TPP); el cual, de alguna manera es complementario y modernizador al actual TLCAN.

Se reitera, independientemente de que Candidato Republicano actual llegue a la Presidencia del vecino país del norte, la relación y dinámica comercial entre estos dos países debe continuar ya que, está amparada por Tratados y Acuerdos Comerciales de carácter internacional, es decir, para evitar polarizar este tema hay que considerar siempre que de acuerdo a las reglas internacionales de comercio, ni México, ni Canadá, ni Estados Unidos pueden modificar el TLC actual sino es en consenso y amparados siempre dentro de las reglas de la Organización Mundial de Comercio (OMC).

Sin embargo, a México se le recomienda – en lugar de atemorizarse-, el ponerse a trabajar constantemente y de inmediato en la diversificación de sus exportaciones hacia otros países, para no depender “casi” de uno solo como hoy lo hace con su 83.0 por ciento de sus exportaciones hacia Estados Unidos. Solo aclarando, las exportaciones actuales hacia ese país no se menosprecian, sino que, son de gran valor para México y habrá que al menos trabajar para conservarlas.

imagen-cuerpo

PREOCUPACIÓN. Cerca del 83 por ciento de las exportaciones mexicanas están dirigidas hacia Estados Unidos y este nivel debe de conservarse.




DEJA TU COMENTARIO
PUBLICIDAD

PUBLICIDAD